Capitulo 58

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Lauren termino de leer la nota y no podía creerlo, anoto el numero sin poder hacer nada más y luego comenzó a romper la hoja en pedacitos,  habia estado frente al hombre que habia matado a su mamá y no hizo nada. 

El mismo hombre que le habia arruinado la vida a su papá y a su mamá ahora se la iba a arruinar a ella y a Camila. 

Y todo era su culpa, siempre supo que ella no estaba destinada a amar y aun asi lo hizo, la amo y puso en ella toda su vida, la morena se enamoro de ella también a pesar de lo que la ojiverde hizo por evitarlo... lo estuvo evitando tanto tiempo para justamente nunca nada dañara a la persona que amara y ahora que la amaba seria ella quien la hiciera sufrir de una forma horrible, no solo le rompería el corazón a Camila si no que tendría que pisotearlo, y burlarse de eso, como si ella no valiera nada, como si siempre le hubiera mentido.

Y ella la odiaría y jamás podrían estar juntas y ser felices... y todo por Thomas.

Lauren moría por ir y matarlo, sacarle órgano por órgano al asesino, pero el tenia razón, tenia sus formas de enterarse, conocía cada uno de sus movimientos, un movimiento en falso y alguien moriría... asi que por más que le doliera, la dejaría... haría todo lo que Thomas habia dicho en sus instrucciones.

La primera opción era preferible, la segunda inaceptable, jamás permitiría que la matara, la violaran, golpearan y torturaran... al menos lo emocional algún día pasaría y ella podría ser feliz con otra persona más que a ella eso la matara de solo pensarlo.

-¿Lauren? ¿Ya te moriste?- escucho la voz de Camila y se puso de pie rápidamente, intentando poner una expresión neutra y aventó los restos de la hoja a la chimenea que estaba a la entrada de la sala, la vio a ella ahí, parada en el comedor y buscándola.

-Hola.- le dijo la ojiverde intentando mantener una voz firme, no podía levantar sospechas -¡Perdón! me senté en la cochera y casi me quedo dormida.

-Eres una tonta Jauregui... me puse a ver tus libros  ¿Algún día me prestaras "El Psicoanalista"?

En ese momento Lauren odiaba a todo Psicoanalista, porque Thomas parecía ser uno, pero uno cruel, sádico y malvado.

-Claro amor... cuando quieras.- le dijo la ojiverde.

Lauren se quedo mirándola, mientras ella le sonreía con tanto amor, con tanta dulzura, sinceridad y felicidad en su rostro, y se dio cuenta de que esa era la ultima vez que estarían juntas, a partir de mañana nada volvería a ser lo mismo jamás, jamás estarían juntas nuevamente, la morena la odiaría y nunca volvería a sonreírle de esa forma.

Sin perder tiempo, corrió hasta ella y comenzó a besarla de una forma apasionada, mientras la pegaba con fuerzas a su cuerpo y la tomaba por la cintura, acariciaba su espalda, sus piernas, la levanto en el aire sin dejar de besarla y la fue subiendo a su habitación, chocando con cada una de las paredes, tropezando en algunos escalones aunque sin llegar a caerse, la besaba con pasión, con deseo, con dolor y con todo el amor que sentía por ella y que siempre sentiría.

-¿Lauren que pasa? Algo te tiene afectada.- le dijo ella, sabia que algo le pasaba y eso a Lauren no le convenía.

-No amor... todo esta bien solo necesito hacerte el amor como la primera vez.-le dijo Lauren y ella la miro confundida.

-¿Salvajemente? ¿Por qué?- pregunto ella y Lauren la miro mientras la pegaba contra la pared de su habitación.

-Un impulso-mintió, lo único que quería era hacerle el amor como la primera vez, la primera que habia marcado el inicio de un amor y la ultima seria igual, porque marcaba el final de ese amor.

Through Truth (Camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora