-¿Me escuchas niño?
Jake miró el piso una vez más tratando de que alguna palabra se atreviera a salir de su boca, sin embargo, por más que lo intentó con todas sus fuerzas, no tuvo éxito alguno.
-No responde.
Cerró los ojos y se dejó llevar por el suave vaivén que producía el movimiento de la patrulla que lo transportaba hacia algún lugar desconocido.
-Jake háblame.
Intentó moverse para abrazar a su prima al reconocer su voz así ella dejaba de llorar pero se le hacía imposible mover un sólo músculo de su cuerpo que por alguna razón había dejado de obedecer las órdenes que se le daba lo cual frustraba aún más a Jake.
-¿Recuerdas lo que sucedió?
Él entendió a la perfección la pregunta sin embargo no pudo responder.
¿Lo que sucedió?... ni siquiera estaba seguro. Ni siquiera sabía donde estaba ni cómo había llegado a esa triste habitación.
Quería recordar los hechos de esa tarde, pero sentía que una enorme nube gris se interponía en su mente.
Tenía pequeñas imágenes de lo ocurrido pero no tenía idea en que se relacionaban. Jake recordaba haber visto a su padre más alegre que de costumbre. Tenía esa alegría que no demostraba desde que su esposa había fallecido. Eso le dio alegría a Jake, le dio esperanzas de que había recuperado a su padre.
Luego recordaba haber saludado a su padre desde el cubículo en el que estaba sentado esperando que la atracción de la feria comenzara.
Lograba sentir la adrenalina en cada caída de la montaña rusa a medida que pasaban las escenas en su cabeza. Sentía como se le presionaba el pecho cuando la atracción bajaba abruptamente.
Sintió de nuevo esa sensación de angustia y miedo al no encontrar a su padre en el lugar que había acordado. Si mal no recordaba, Jake no había sentido eso desde ese día en el que esperaba pacientemente a su padre en ese frió pasillo de hospital, deseando con ansias a que su madre saliera de esa habitación ya recuperada y lo abrace con cariño como sólo ella sabía hacerlo. Sin embargo, sólo pudo ver a su padre cruzar esa puerta con el rostro bañado en lágrimas. Después de eso no volvió a ver a su madre.
También recordaba a su prima abrazada a él mientras lloraba cuando una pareja les preguntó donde se encontraba su tutor responsable.
A los policías bajando de la patrulla y a su prima llorando aún más fuerte cuando los hicieron subir al auto.
Luego todo era borroso.
Sentía un enorme vacío dentro de él. No le cabía en la cabeza que su padre lo había dejado a su suerte junto a su prima en una feria. No entendía como es que una persona tan amorosa hubiera cometido un acto tan horrible como ese.
-¡Jake por favor!- Las manos de Lina presionaron con fuerza uno de sus brazos, pero él no pudo hacer otra cosa que bajar la cabeza clavando sus ojos en sus manos dejando que una enorme mota de pelos cubriera sus ojos.- Tengo miedo Jake.- Se le partió el corazón al escuchar el destrozado tono que utilizó su prima y se enojó consigo mismo al no poder hacer nada para calmarla.
-¿Podrías decirnos lo que sucedió Jake?- El niño miró a su izquierda casi inconsciente de sus actos y alzó una ceja al encontrar a un policía regordete con un enorme bigote mirándolo con atención mientras que en sus manos sostenía una libreta y un lápiz esperando ansioso a que Jake dijera aunque sea una palabra par anotarla.- ¿Ni siquiera tu edad?- Jake volvió a bajar la mirada ignorando al policía quien bufó frustrado al no obtener respuesta alguna.- Creo que no tiene caso seguir reteniendo a los padres de la niña. Ellos no hablarán. Tráelos.- Ordenó a otro oficial que se encontraba en la sala. Él asintió y se apresuró a llegar a una habitación parecida a la de los niños donde se encontraban los padres de Angelina nerviosos y enojados.
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¡Esto Es Vida!
RomanceTodos tenemos secretos, no importa de que clase, todos los tenemos. Angelina tiene su propio secreto, uno muy oscuro, pero jamás lo comentó con nadie ya que si lo revela su vida correría riesgo, y pasó por mucho como para tirar todo por la borda...