Capitulo 46

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 LINA P.O.V.

 -¡Hola! ¿Cómo estás?- Traté de ahogar un sollozo, pero se me hizo imposible.- ¿Lina? ¿Qué pasó? ¿Estás bien?

 -¿Qué sucede?- Se escuchó en el fondo. Era Teo.

 -¿Puedes venir a mi casa, Let?

 -Claro, pero... ¿Qué pasa?

 -Quiero que vengas. Si es posible sola.- Respiré profundo tratando de recobrar un poco el aliento, pero un horrendo pinchazo en mi costado me lo impidió.- Por favor, Let.

 -Mmhh... de acuerdo, estaré ahí en unos veinte minutos.- Dijo antes de colgar.

 Dejé caer mi celular en piso y miré a Jake antes de volver a llorar.

 Mi cuerpo temblaba por completo. Estaba mojada por el sudor, como si me hubiera lanzado agua encima. Sé que mi espalda estaba cubierta de sangre, pero no estaba interesada en saber como se veía, suficiente tenía con el dolor.

 Jake se acercó a mi lentamente y arrodilló a mi lado.

 -Por Dios, Linlin.- Murmuró.- ¿Por qué nos tocó vivir esto?- Tragué un poco y jadeé.

 No puedo creer que Jake se encontraba aquí conmigo.

 Hice un enorme esfuerzo y me volteé para quedar boca arriba, ya que, en la posición en la que me encontraba anteriormente, no me ayudaba a respirar muy bien. Sin embargo, no pude evitar soltar un fuerte alarido al hacerlo.

 Miré a mi primo desde donde estaba y me pregunté como hizo él para soportar tanto dolor.

 (...)

 -Jake.- Solté mientras sollozaba y trataba de limpiar las heridas que había en su pecho.- ¿Por qué te metiste?

 Él no dijo nada, simplemente soltó esa irritable sonrisa. Esa sonrisa de alivio ¿Cómo puede sonreír en momentos como este?

 -¿Estás... estás bien?- Preguntó.

 -Eso no importa ahora, Jake.

 -Contesta.- Suspiré y sequé mis lágrimas.

 -Si. Si, estoy bien.- Él suspiró y volvió a sonreír.

 -Eso es todo... lo que importa.

 (...)

 Este no era el caso. Yo era la víctima ahora y no debía preocuparme si él estaba bien o mal, porque él ya no estaba.

 El tiempo paso lentamente. Mi visión comenzaba a tornarse borrosa y en mis oídos se escuchaba un leve pitido molesto y constante. La cantidad de sangre que seguramente estaba perdiendo, me estaba afectando mucho.

 -Jake.- Susurré. Mis ojos lo buscaron por la habitación y cuando él apareció a mi lado, mis ojos se llenaron de lágrimas.- No voy a aguantar. Ya no puedo.- Jake frunció el ceño y su expresión se endureció.

 -Si vas a aguantar, Lina. Sólo un poco más. Let ya está por llegar.

 -¿Y luego qué? ¿Cómo le explico que fue mi abuela? ¿Y cómo le digo que me ha estado haciendo esto desde que prácticamente llegamos aquí?- Pregunté agotada.- Luego de que vuelva a su casa ¿Qué voy a hacer? Voy a tener que seguir aguantando a esa mujer y sus abusos. Ya no quiero. No puedo. Estoy harta de vivir así. Quiero morir Jake.

 -No digas eso. Ni siquiera lo pienses.- Dijo apretando la mandíbula.

 -Es lo que quiero, Jake.- Dije segura. Él negó al mismo tiempo en que sus ojos se humedecían.

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