THE BIGGEST CHALLENGE OF LIFE IS TO LIVE

Capítulo 45.- PERDIDA

Me levanté del sofá sobre las 8. No pude dormir nada. Malú se había quedado dormida hacía apenas una hora, por lo que quise dejarla dormir un rato más... 

Teníamos que estar a las 10 en el estudio para grabar el videoclip, y a ver lo que salía de ahí... 

Fui al baño, me miré al espejo y puedo decir que hasta me asusté. Tenía los ojos hinchados, rojos y llorosos y unas ojeras impresionantes... ¡Pedro me mata!

Me vestí con lo primero que encontré. Me puse un chándal y una sudadera.

Ya vestida y con bastante calma cogí dinero y fui al quiosco. Tenía que comprar la revista para saber lo que habían publicado... 

El más cercano estaba a unos 5 minutos andando, que a mi paso venía siendo bastante.

Cuando llegué, miré al cielo un momento. Muy bajito pronuncié "mamá, estés donde estés, ayúdame".

Respiré y entré. 

-Buenos días joven ¿puedo ayudarla en algo?

-Si... verá... Vengo a buscar la revista ¡Hola!

-Esto... Siento decírselo... algo ha pasado en la redacción que hoy no han podido publicar nada... De todas formas puede llevarse el ejemplar de ayer. 

-¿CÓMO? ¿NO HAN PUBLICADO NADA?- Mi cara de alegría pareció sorprender mucho al hombre, que se me quedó mirando extrañado. 

-Pues... no. Como le digo ha ocurrido algo que desconozco en la redacción. 

-Perfecto, muchísimas gracias.

Le dediqué al hombre una sonrisa y me fui corriendo. Estaba feliz. 

"Gracias mamá" suspiré esta vez, ahora casi gritando.

Se que tenía que saberse, pero creo que no ahora, no era el momento... Por eso estaba feliz. No cabía en mi de tanta felicidad. Desde luego... vaya montaña rusa se había vuelto mi vida. Tan pronto estamos arriba, como bajamos de golpe... pero luego volvemos a subir y una y otra vez la misma historia. 

Llegué rapidísimo a casa de Malú. Tenía unas ganas enormes de entrar con mi gran euforia y despertarla para darle la genial noticia... Pero necesitaba descansar. 

Me puse a ver la tele y a las 8:30 me fui a duchar. 

Me cambié y me puse unos vaqueros rojos, una camiseta blanca y unas botas blancas.

Cuando terminé de prepararme eran ya las 9:00

Fui a la cocina y preparé el desayuno. Tuve la suerte de que más o menos en frente de la casa hay una floristería, así que fui y compré 2 rosas blancas y se las puse en la bandeja. 

Me senté en el suelo en frente al sofá y le acaricié el pelo con dulzura. Me acerqué a ella despacito y la besé. Casi sin separarme de ella vi como una sonrisa empezaba a asomarse por sus labios. 

-Muy buenos días princesa.- le dije con una sonrisa.

-Tenerte a mi lado es lo único que los hace buenos...- dijo con cierto aire de tristeza

-Ya...bueno... tengo algo que contarte Malú. 

-Claro. ¿Qué pasa? Ha salido la revista ya ¿no?