Lord Skeltor

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Lady Silóe

La absurda conversación con mi madre, había logrado que mi sangre hirviera de furia, todo este asunto del baile me parecía una locura (Ni siquiera los fantasmas de Myrcella tenían tan poco sentido como esto).
Lo peor era la cantidad de gente a la que le gustaban este tipo de cosas, los nobles de menor rango habían traído a sus hijas adornadas como cacatúas (Seguramente esperando que alguna llame la atención de Han), los ancianos solterones, pavoneaban sus adornos de oro sobre sus redundantes barrigas, todo esto parecía una puesta en escena ridícula.

—No está tan mal como decían —le oí susurrar.

—¿Está hablando conmigo, Mi Lord? —le pregunte al hombre que había soltado la frase.

—¿Qué? —dijo confuso— Me temo que no soy un lord, mi lady ¿Myrcella?.

—No, no, Lady Myrcella es mi hermana, ella está por allá —digo señalando el extremo izquierdo en donde Myrcella está conversando con Eustace— ¿Y usted es...?.

—Rickard Skeltor, mi lady —hace una ligera reverencia.

Cuando levanta el rostro, logro verlo con mayor claridad, tiene el cabello muy rubio, los ojos grises y la mandíbula marcada, es guapísimo.

—Si usted no es un Lord... ¿Qué hace aquí? —digo, rogando no ser irrespetuosa.

Él sonríe de lado y parece estar dudando de su respuesta.

—Digamos, mi lady, que si la vida fuera justa, yo sería un lord, pero a cambio de eso, solo soy el hijo de un lord.

¿Eso quiere decir que él es...?.

—Un bastardo —dice como si leyera mis pensamientos— El bastardo de Lord Breham, él fue quien me invitó a venir. Si mi presencia la ofende yo podría...

—¡No!... Por supuesto que no me ofende, muy por el contrario, me alegra haber encontrado a alguien con quien hablar.

Skeltor levantó una ceja con curiosidad.

—Lo siento mi lady, pero no estoy interesado —dijo mientras caminaba hacia Myrcella.

Los Fantasmas De Frogville © | CompletaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora