Obsesión

Capítulo 1

¡ANTES DE LEER!

Debo aclarar un punto importante. 

Todo lo que esté escrito con cursiva, son hechos que sucedieron en el pasado. Por el contrario, los que están escritos con imprenta son cosas que están sucediendo en el presente. 

Aclarado esto, podemos continuar. :D

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¿A alguien le ha pasado que, al llegar el primer día de clases se encuentra increíblemente nervioso y emocionado? Bien, pues a mí no.

Cada vez que llega el primer día de clases, es la peor de las torturas. Me agobiaba pensar en que era apenas el inicio de un ajetreado y rutinario año escolar, ver a los mismos profesores amargados de siempre y, en algunos de los casos, escuchar sus aburridas historias personales. No me sorprendió que, en apenas el primer día ya nos enviaran tanta tarea. Seguramente esa sería una noche en la que no podría dormir gracias a los inhumanos profesores, que no respetan al menos la primera semana de clases.

Toda la mañana quise estar sola. Aunque, en realidad solo me habría gustado encontrar a cualquier otra persona y no a mi novio. Normalmente, cuando estoy con él las cosas se ponen extrañas para ambos, ya que el silencio que hay entre los dos y el poco intercambio de miradas es incómodo. Al momento de finalizar las clases me tardé lo más que pude en recoger las cosas de mi escritorio, me tomé mi tiempo para guardar los cuadernos dentro de la mochila en forma alfabética. No sabía por qué lo hacía, pero lo que sí sabía era que me ayudaba a ganar tiempo.

Me despedí de algunos de mis compañeros con una amable sonrisa, colgué mi mochila en el hombro, recorrí el pasillo sin mirar a nadie a mí alrededor, con ambas manos dentro de los bolsillos de mi blue jean. Sabía que no debía ser toda negatividad, quizá ese año (Que por cierto era el último) vendría lleno de gratas sorpresas, a lo mejor no tenía que ser todo tan repetitivo como en veces anteriores.

—¡Alex! —Escucho un agudo grito.

Volteo a la dirección de donde proviene la voz y me encuentro con la amplia sonrisa de Melanie, mi mejor amiga desde la clase de plastilina en el kínder. Sonrío para ella y me acerco al pequeño grupo de amigos, donde se encuentran algunos chicos del equipo de fútbol, sus novias, mis amigas y también mi novio.

—Desapareciste toda la mañana, ¿quieres que te lleve a casa? —Dice Isaac dándome un beso en los labios.

—Puedo ir sola, quiero un poco de tiempo para mí. —Me encogí de hombros.

—¿Ya viste los nuevos casilleros? ¡Son más amplios! Yo los amé. —Afirma Lena emocionada.

—No, aún no sé siquiera cuál será mi casillero este año. —Respondo despreocupada.

Lena y Melanie se miran la una a la otra y sonríen como si ocultaran algo, juntas se apoderan de mí y me apartan de Isaac tomándome por ambos brazos. Una de cada lado. Y se esmeran en conducirme directo a los casilleros.

—Te llevarás una gran sorpresa. —Asegura Melanie.

Isaac camina detrás de nosotras.

—Saben que es de mala educación dejar a alguien hablando solo, ¿cierto? —Se queja él.

Por lo visto, no les importa sus quejidos pues hacen caso omiso. Me sitúan frente a un casillero lleno de papeles de colores, con pegatinas y escarcha por todos lados. Miro a mis amigas.