Obsesión

Capítulo 14

Una vez más, me gustaría decir que las fiestas son lo mío, pero nuevamente tengo que ir obligada a alguna de las que organizan los integrantes del equipo de fútbol. Solo para darme cuenta nuevamente de que no es realmente lo mío.

Cuando llegamos encontramos lo mismo de siempre, música extremadamente alta, personas bailando y vomitando por todos lados, el hedor que emanan tantos cuerpos demasiado juntos y asquerosamente sudados. Isaac me lleva de la mano como es su costumbre, dedicándole todas sus sonrisas a cualquier otra persona que no sea yo, saludando a todos con un apretón de manos o en caso de ser chicas, con un beso en la mejilla.

Una vez que estamos todos dentro veo desde la lejanía a Bianca, quien al percatarse de mi presencia me saluda levantando la mano. No se acerca, ya que, le aterra la gente con la que estoy rodeada. He descubierto que con, personas tan distintas a ella como jugadores o porristas es tímida, incluso podría decir que se siente inferior.

–Iré a charlar con los chicos. –Habla Isaac tratando de hacerse escuchar por encima de la música.

Cómo si hubiese sido un milagro del cielo suelto su mano de inmediato y sonrío para él.

—No te preocupes, nos vemos luego. –Respondo casi de inmediato.

Trato de evitar que diga algo más, haciendo el intento de salir de ahí y correr junto con Bianca. Para mí desgracia, choco con Melanie quien me empuja de vuelta y termino cayendo en brazos de Isaac.

—¿A dónde con tanta prisa? —Pregunta Melanie riendo.

—Sí nena, no me digas que te quieres separar de mí tan pronto, pensaba llevarte conmigo. —Añade Isaac poniendo esa característica sonrisa coqueta suya.

Con ambos brazos lo empujo suavemente para alejarlo de mí, logro hacerlo y sonrío.

—Solo necesito un poco de aire. —Aseguro intentando alejarme una vez más.

Melanie aparece a mí lado, esta vez ha adquirido un vaso con alguna alcohólica bebida.

—Vete ya, Alex y yo nos vamos a divertir. —Melanie levanta su vaso en alto y me rodea con el brazo.

Cuando Isaac se fue convencido, yo decidí escapar de las garras de mi amiga. Me escabullí dando empujones a cualquier ebrio que se cruzara en mi camino. Solo quería encontrar a una sola persona que podría salvarme de tener que fingir ser la perfecta novia de Isaac, al menos por esta noche. La encontré riendo con un chico que, al parecer esa su amigo y decidí acercarme, toqué su hombro y la saludé con un beso en la mejilla.

—Pensé que te quedarías con esos aburridos. —Dice. —¡Ah! Te presento a Scott, es mi mejor amigo.

Miro en su dirección y me encuentro con un chico alto y delgado, con el cabello castaño y ojos verdes. Me saludaba moviendo la mano de un lado al otro de forma animada, le sonreí y repetí el mismo gesto que él.

—Prefiero estar contigo, como dijiste antes, ellos son muy aburridos. —Respondí cerca del oído de Bianca para que solo ella me escuchara.

Tomó un vaso y me lo tendió, lo tomé y me percaté de su contenido.

—Gracias, pero no bebo. —Intenté devolvérselo.

Ella no lo aceptó, me dio una palmada en el hombro y se rio a carcajadas, al parecer ella ya había bebido.

—Vamos, debes unirte al lado divertido. —Gritó levantando los brazos y empezando a bailar al ritmo de la música. —Scott, dile que se una.

En un abrir y cerrar de ojos el castaño estuvo junto a nosotras con otro vaso entre sus manos, bebió de él y me miró con una amplia sonrisa.

—¿Alex, cierto? —Asiento. —¡Diviértete chica con nombre de chico!