El chico de puntería perfecta.

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Antes de que lean el capítulo, debo explicarme porque que he tardado tanto. Y es que, sufrí un tipo de Instituto post depresión luego de publicar el último cap, así que pedí ayuda a mi sis. :3 Ahora, con ustedes, la maravillosa Rlk, co - creadora de instituto, WKTB, y CR y Apocalypsy. Les presentará un resumen digno de mención.

Rlk aparece saludando a su público, quien le lanza flores, carraspea ceremoniamente y...

En capítulos anteriores: Percy quiere encajar en la sociedad, a pesar de que su único amigo, Luke, le dice que no se está perdiendo de nada porque el resto del mundo es una mierda. Ambos asistieron a la fiesta de Drew, por insistencia de Perce, y terminó siendo la peor noche de sus vidas. Pero, consiguió la atención de Dylan, que ahora quiere hacerle un cambio de look tipo rayita, y ha decidido ser su amigo. Amistad a la cual Luke se opone, debido a los acosos y violencia que han tenido los hermanos Thompson en contra del Percesito, incluida la ultima pelea que se desarrolló en el Instituto. Pelea en la cual también se vio involucrado Will Solace, quien llamó accidentalmente la atención de Nico di Angelo, al casi estrellarse con la bicicleta sobre el asfalto, luego por su filantropía, amor hacia los perros y talento para poner música de la buena en las discotecas de Apolo. Nico está visiblemente interesado en Will, aunque ni él mismo sabe de qué modo, mientras el solecito se niega a aceptar sus propios sentimientos, que cada vez más insisten en atormentar su mente, y luego de que di Angelo le devolviese su celular (con número del angelito incluido), la lengua de Will intenta traicionarlo al casi mencionar al "Chico que le gusta".

*lloro* Te quiero, sis ♡

Rlk: yo también ♡ *se abrazan llorando*

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Los gruñidos, jadeos, y gemidos mal disimulados que suelta Percy Jackson, escapan del vestidor hasta oídos de algunos clientes que rondan cerca de ellos, pero ocultos de la vista de todos, mediante una tela gruesa de color negro. Algunos se quedaban escuchando con curiosidad, pero otros seguían caminando incluso más rápido que antes, escandalizados por lo que sus orejas les hacía oír.

- ¡Desvergonzados! -Rezongo una mujer mayor, caminando del brazo de su nieto, mientras que con la otra mano, se soplaba con su abanico.- ¡Hacerlo en pleno día y en un lugar público! ¡YA no hay decencia entre la juventud de hoy en día!

Mientras tanto, dentro del vestidor, probador, (como se diga en sus países) Percy, de verdad que trataba de soportar el dolor en silencio como un hombre digno de Esparta, pero, ¡demonios sí que era difícil! Más cuando dos chicos intentaban al mismo tiempo, introducirlo dentro de algo tan alargado e incómodo, casi en contra de su voluntad.

- Vamos, mételo, Luke. - Le ordenó Dylan al rubio, con sus manos trabajando, expertas. - ¡Percy deja de poner resistencia o será aún más doloroso para ti! ¡¿Luke, puedes ayudarme?! ¡Soy el único que está haciendo todo el trabajo aquí!

- ¡Eso intento, idiota! - protestó Luke a Dylan. - Pero es casi imposible meterlo, ¡es demasiado estrecho!

- ¡Me están lastimando allá atrás! - Aulló el azabache, con la respiración entrecortada. - ¡Basta, aparten sus manos de mi trasero, he cambiado de opinión!

- Solo aguanta un poco más, Percesito. - Jadea Dylan, el sudor corriendo por su frente, a la par que se posiciona para mejorar su técnica. - Solo un poco más, ¡Luke! Mételo conmigo, puedes hacerlo. Te haré un espacio, ¡vamos!

No te escondas del Sol, AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora