Simplemente... No puedo (Steve Rogers Y Tú)

Uno y contando

-Cual era tú nombre?
-__________- respondí con simpleza.

-Ok, __________. Dime, cómo te sientes?
-Bi...en? Aunque, un poco nerviosa.
Y, rara, a la vez. Ya que... no conozco a nadie- mentí.

-Todos nos conocen- frunció el ceño e hizo una mueca de orgullo -Somos los vengadores. Y, tú, niña...- me señaló -...serás una de los nuestros. Oh sí. Muy, MUY pronto.

-A já. Aquí es- pedí que se detuviera frente a mi departamento -Vuelvo rápido- bajé del auto y entré de inmediato al lugar.

Saqué mi mejor ropa y la metí a una mochila.

Mientras iba, buscaba. Revolvía y regresaba, oí una voz:

-Te vas?

Lo miré sobresaltada -S-sí. Y, será mejor que me digas que haré.
-No, solo dales tú ternura e inocencia. Usa ese, "distractor" con todos ellos. Así harán lo que tú quieras.

-Natasha

-Qué?

-Es un obstáculo!- aclaré obvia -No voy a... Usar el truco ese con ella. Digo, es... Extremadamente sexy, sí. Pero somos chicas y...
-Hazla tu amiga- alzó los brazos -Simple.

Cerré la mochila.

La coloqué trás mi espalda y resoplé:

-Bien- miré directo a sus ojos verdes -No le defraudaré señor del engaño. Conseguiré lo que quieres. Con eso no habrá problema.

Salí.

Volví al auto con una sonrisa ladina. Dispuesta a cumplir con mi promesa.

El magnate futurista manejó de regreso a la torre. La carretera, los autos, el tráfico, hacían que el tiempo en silencio que transcurría entre nosotros de hiciera incómodo. Aburrido e inquietante. Por lo cuál, alguien de los dos tenía que articular palabra.

-Hablemos de tí. Tienes... novio?
-Nop.

-Que suerte- reí bajito volteando al exterior de la ventana. Ya que, esperaba más de las típicas preguntas masculinas.

-Haz tenido?
-Sí, algunos.
-Se nota. O bueno... Qué? No. Sabes qué? Fue una pregunta estúpida. Torpe- golpeó su frente en plan de auto regaño.

-Por qué lo dices?- llevé mi mirada al señor Stark.

-Digo, eres una chica atractiva y carismática. A cualquiera le gustarías.

Sonreí.

-Gracias. Lo tomaré como un cumplido- guardé silencio. Esperé a que pasaran unos cuantos segundos y hablé:

-Tú, tienes novia?
-Algo así.
-Mm...- intenté seguirle el juego -Es una pena, no crees?

-Perdón? Te refieres a..?- dejó que completara.

-Que es una pena que tengas novia. O algo así...- me acerqué a él un poco -Eres un hombre atractivo, divertido... Sin ninguna preocupación y demasiado listo que cualquier otro. Al menos, de los  que yo conozco.

-Faltó que agregaras millonario, filántropo, playboy...
-Cuál es el nombre de la afortunada?- regresé a mi posición actual.

-Sé que está fuera de contexto, pero, enserio que adoro tu voz. Lo siento, debía decirlo.

Sonreí triunfante. Lo había logrado.

-Estamos lejos de Nick. No hay reglas para mí. Aunque, tú regla es no ser infiel.
-Se ve que no me conoces. Yo nunca acato órdenes,______. Obedecer no es mi estilo.

Acerqué mi rostro al suyo y él al mío hasta besarnos. Conduje las manos al cuello de su elegante camiseta y tiré de ella actuando necesidad.

Las venas volvieron a brillarme.

Para esto, mi cuello ya recibía una dosis de besos en el cuello, y par de caricias en el área de mi cintura.

"Uno, y contando..."

Remarqué en mi mente.

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°°°

"-Gracias, por... traerme, señor Anthony Edward Stark.
-No fue nada- detuvo el auto y retiró la vista del frente para ponerla ahora sobre mí. Correspondí contemplando por última vez sus labios.

A los dos nos quedaba más que claro que lo acontecido instantes atrás no sería contado, ni se volvería a dar de nuevo.

Lo sabíamos.

Así que, antes de bajar le besé. Y como las veces anteriores, correspondió."

°°°

-Esta será tu habitación por mientras- escuché al doctor sacarme de mis pensamientos -Es... nuestro lugar de análisis. Disculpa por ello- solicitó avergonzado.

-Oh, no te preocupes. Esto... Está bien! Sip. Intentaré acoplarme. Además... Será solo un corto tiempo.

Silencio. Y conexión entre el color de los ojos.

Exhaló:

-Bueno, yo...

-Tú debes ser Hulk, cierto?
-Sí...- contestó sin ganas.

-Wow, de verdad te admiro. Me encanta cuando te pones verde y grande. Al igual, eres un gran científico. Y... Sonaré muy idiota, pero... Puedo darle un abrazo? Es que, soy tu fan!- dije emocionada.

Sonrió divertido y asintió abriendo los brazos. Me acerqué a él y lo abrazé.

-Imaginaba otra versión de usted. Es tan amable realmente.

Rió por lo bajo -Creo que debiste especificar a quien querías abrazar. Tal vez a Hulk, o, a Banner.

Reímos.

La puerta se abrió y Natasha entró:

-Oh, yo escogería a los 2. Son increíbles- resopló -Interrumpí algo?

Nos separamos.

-Yo... le mostraba su lugar para dormir.
-Y... Por eso se abrazan? O alguien cumplió años?

Noté una chispa de celos en su voz.

-Emm... No. S-solo...
-Olvídalo, Banner. Estaba jugando. Cuando te desocupes ve a buscarme, voy a entregarte algo que el capitán quiere que hablemos.

-Yo también iré?- cuestioné -Digo, podrían necesitarme. Estoy dispuesta a ayudar.

-No se te mencionó, _______ en ningún momento. Tranquila niña, aún eres la novata aquí- esbozó su falsa sonrisa.