37. ¿Me llevarás a mi casa?

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-los dejaré solos, si necesitan ayuda pueden llamarme

El rubio asintió y la enfermera cerró la puerta.
Ambos conectaron sus miradas, el silencio volvió a adueñarse de la habitación y las heridas de la chica de nuevo volvieron a atormentar a Min Yoongi. Él dio pasos lentos hasta la camilla como si le diera tiempo a ____ para detenerlo, pero ella no lo hizo, ella lo detalló.
Suga tímidamente se sentó en el asiento junto a la camilla y al tenerla tan cerca lo hizo entrar al mundo del nerviosismo.

-¿así te llamas, verdad?, te llamas Yoongi

El tragó saliva y de repente sintió que la habitación se hacía más pequeña, el espacio le faltaba y probablemente pronto le diera un ataque de pánico.

-si
-¿desde cuando te conozco?
-desde hace un año tres meses

Los ojos de ella no perdían su camino hacia los de él, pues su mirada era atractiva y adorable, parecía como si la mirase así a propósito para no dejarla ir.

-leí tu carta
-está bien
-¿eres mi novio o algo así?

Suga casi se suelta a llorar con esa pregunta. La quería mucho, estaba seguro, probablemente por eso le mintió.

-si

Ella sonrió, se sentía como una adolescente frente al chico que le gusta. Este chico era realmente lindo  y eso la atormentó desde que le vio. El color rojo subió a su rostro y le gustó sentir ese cosquilleo en su cuerpo.

-mira, me vendaron la cabeza

Le presumió con una sonrisa, como si eso fuese la cosa más genial del mundo. ______ se sintió tan bien de saber qué tenía a alguien con ella y no mentía cuando pensó que en verdad quería conocerle mejor al rubio de bonitos ojos.
Yoongi apretó sus pequeños labios y aunque lo evitó no pudo soportarlo más y se echó a llorar, llevó sus manos a cubrir su rostro.

-¿estás llorando?

No recibió respuesta y eso le preocupó a la castaña de grandes ojos. No sabía qué hacer, pero no le gusto verlo de esa manera.

-lamento no recordarte, pero mi doctor y la enfermera me han dicho que los recuerdos comenzarán a aparecer en mi memoria, sólo debemos ser pacientes -comentó con voz suave para tranquilizarlo.

Min Yoongi menos quiso dejar de llorar, aquello no le consolaba nada y el miedo creció a un rango más alto.

-ya no llores

______ llevó una de sus manos a la de él y lentamente la alejo de su rostro para poder verlo mejor.

-no me veas -rezongó el rubio

Volvió a esconder su rostro en su brazo y alejó su mano de la de ella. Casi se le partió el corazón de verlo así.
No con mucha confianza y hasta con un poco de miedo volvió a intentar tomar su mano, esta vez no se negó; le miró atentamente con sus ojos rojos y lluviosos y ella hizo lo mismo.

-tu mano está fría y pálida -dijo la chica.

Ahora analizó su mano, era más grande que la de ella, sin duda las comparó.

-es más grande que la mía, mira
-¿quieres hacerme sentir bien o algo así?
-no quiero que llores
-ni siquiera me conoces
-¿y eso qué?, no me gusta que la gente llore
-que conmovedor

Ella frunció el ceño y lo miró.
Suga lentamente quitó su mano de la de ella y se limpió las lágrimas de las mejillas.

-¿te da pena que te vean llorar?

Suga sólo pidió a Dios, si es que existía, que no dejara que _____ le irritara como la primera vez que la conoció.

-si
-oh...¿lloras por mí?
-si
-nunca nadie había llorado por mí
-pues yo sí

Una sonrisa se dibujó en el rostro de la castaña.

-¿aún te duele la cabeza? -preguntó el rubio.
-si, pero confío en los medicamentos. Mañana me harán un estudio de rayos X y probablemente pasado mañana pueda irme a mi casa
-estaré aquí hasta que te den de alta
-¿sabes dónde vivo?
-si
-¿me llevarás a mi casa?
-sólo por tus cosas, porque te irás a mi casa después
-ni siquiera me has preguntado si quiero ir contigo
-te tengo que cuidar. De todas formas te gusta vivir conmigo
-¿ah sí?

Yoongi asintió mientras de nuevo limpiaba sus ojos para así quitar todo rastro de que había llorado.

-antes vivías conmigo
-¿y por que ya no?
-por qué querías ver que se siente vivir sola

Fue lo único que se le pudo ocurrir, a estas alturas ya no podía parar de mentir.
Ella no quería del todo, se sentía morir de tan sólo pensar que estaría con alguien que no conocía, pero luego pensó que sería una buena idea, así ella podría recordar muchas cosas que realmente quería recordar.

-bien

El silencio volvió a interrumpirlos.
Después de un rato ella se quedó dormida, el sueño también lo amenazaba a él, pero Suga no quería perderse absolutamente nada de ella. Notó como sus ojos se cerraron lentamente y su pecho subía y bajaba, sus labios se entreabrieron y el sonrió.

Wine. EuforiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora