13.

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La cólera crece inexplicablemente en mí, mi vista se vuelve borrosa y el dolor de imaginarla ahí con el puto ese incrementa de manera alarmante.
No sé cómo pude conducir hasta aquí a tan alta velocidad sin sufrir un accidente, puta madre, juro que voy a matarlo si tan sólo le hizo algo que ella no quería.
Subo el elevador y toco cuantas veces puedo la puerta de su departamento, pero nada ¿dónde más puede estar?

Me duele el pecho al ver la casa de Jinyoung, estoy seguro que ella está aquí, es casi lógico. Toco la puerta con mucha fuerza para ser escuchado, las luces de la casa ya están apagadas.
Unas cuantas luces comienzan a encenderse y cuando escucho pasos más de cerca es cuando dejo de tocar. La puerta se abre, Jinyoung tiene puesta la pijama y sus ojos están hinchados, lo he despertado, me da lo mismo para ser honesto. 
Su rostro al verme es de disgusto pero supongo que él mío tampoco es muy amable.

-¿esta _____ aquí?
-¿qué mierda quieres?

No tengo paciencia, menos en estos momentos. ______ está bajando las escaleras acomodándose los listones de la bata, al verme se queda pasmada y deja de caminar, se queda justamente en el segundo escalón.
Hago a un lado a Jinyoung y camino hasta ella a pasos grandes, ella sigue sin moverse y juro que mi pulso se acelera cuando estoy cerca de ella.
La tomo de sus mejillas suavemente y me acerco a ella como antes solía hacerlo, casi puse nuestras frentes juntas.

-¿estás bien?

Mi voz suena agitada, mi pecho sube y baja, noto la misma reacción en ella.

-¿qué carajo haces?...

Jinyoung me toma de los hombros alejándome bruscamente de ______ haciendo que casi pierda el equilibrio.

-no me jodas ahora Jinyoung, no estoy de humor
-yo tampoco
-me vale un pedazo de mierda -entonces volví la mira a ella. - ¿estás bien?

Ella tomó a Jinyoung de los hombros para tranquilizarlo y aunque fue un gesto simple yo estuve a punto de morir ahí mismo.

-estoy bien, gracias
-necesito hablar contigo
-ya es tarde y no hay nada de que hablar -contestó Jinyoung.
-vas a terminar con mi puta paciencia -me acerqué a él.
-ya basta, por favor

_______ se puso en medio de ambos alejándonos del pecho, sentí que mi ira cesó.

-necesito hablar contigo
-¿para qué Yoongi?, ¿eh?
-sé que algo no está bien contigo, necesito hablar, por favor

Ella suspiró y asintió, Jinyoung frunció el ceño y cruzo los brazos.
Ella se dio media vuelta para verlo de frente.

-necesito hablar con él

Jinyoung me mira retante, se ve en sus ojos su disgusto.

-has lo que quieras, yo voy a dormir
-Jinyoung...

Ella lo toma de la mano y él se zafa suavemente para subir las escaleras con desgano, yo sentí un alivio al verla a los ojos.

-bueno, ¿de qué quieres hablar?

Mi mirada se suavizó con ella.

-¿qué pasó hoy en tu trabajo?

Ella esquivó mi mirada fijándola en otro punto de la habitación, el color rojo subió a sus mejillas, sus ojos se cristalizaron y fue ahí donde me preocupé.

-¿por qué quieres saber eso?
-me llegó un mensaje a mi celular del hijo de perra de Kim

Ella abrió mucho los ojos.

-¿qué decía?
-pendejada y media, pero hubo algo que me encabrono más, me dijo que lo habían hecho en su escritorio
-¡¿qué?!

Comenzó a caminar de un lado a otro con desesperación.

-yo...sé que eso no es verdad -dije al fin con toda la seguridad del mundo.
-¡pues no!, claro que no es verdad
-dime qué pasó, por favor

La tomé de las mejillas e hice que me mirara a los ojos también.
De sus ojos comenzaron a descender lágrimas y yo sentí un golpe tan fuerte en mi pecho a causa de eso, joder es preciosa hasta cuando llora.

-me tocó Yoongi, me tocó y me besó a la fuerza, quería que me acostara con él a cambio de publicar mi libro

Sollozó con fuerza escondiéndose en mi pecho; yo sabia sobre sus sueños y uno de ellos era ser una famosa escritora algún día y que este hijo de puta venga y se aproveche de eso me hace querer ir por él y darle la putiza de su vida. La ira vuelve a brotar, mi respiración se acelera, tengo que ir por ese hijo de puta.

-Yoongi, ¿a dónde vas?
-me las va a pagar

Ella me toma de los hombros haciéndome retroceder de golpe.

-¡suéltame!
-¡no!
-¡ese imbécil no debió ni siquiera tocarte un pelo!
-¡pero lo hizo!

Me quedé sin palabras al verla llorar así, mi respiración seguía tan agitada e incluso sentía que podía darme un paro cardíaco.

-no pasó a mayores, alcancé a escapar antes de cualquier cosa. No te preocupes por mí, Jinyoung y yo mañana iremos a denunciarlo
-¿que no me preocupe por ti?, ¿estás escuchándote?
-así es, gracias por venir pero ya sé qué hacer, por favor vete

Un dolor diferente me atacó, yo debería protegerla de todo y ahora ella me estaba echando.

-no quiero
-Yoongi...
-¿te lastimó?

Me acerqué a ella tomándola de las mejillas nuevamente, me alejó con cuidado.

-no
-dime la verdad
-te estoy diciendo que no, ahora debes irte que ya es la una de la madrugada

Un nudo en la garganta amenazaba con salir, pero es más que claro que no voy a derrumbarme frente a ella, no otra vez. Asentí con un poco de orgullo, la mayoría era tristeza.

-bien
-ve directo al departamento, no quiero que hagas una estupidez -se limpió las lágrimas de las mejillas.
-que más te da
-¿qué más me da?, no quiero que te pase nada, ¿si entiendes no?

Bufé, me di la media vuelta para caminar hacia la salida, su mano tomó la mía sin permiso alguno, la miré con el ceño fruncido.

-en verdad no quiero que te pase nada Yoongi

Me dio un escalofrío al escucharla decir aquello con tanta preocupación.
Me zafé suavemente de su agarre para abrir la puerta y salir de ahí de una vez por todas.

Wine. EuforiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora