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Narra escritor.

La luz solar caló en los párpados a Min Yoongi haciéndolo gruñir por tan mal momento, pues odiaba el calor y todo lo que tuviera que ver con el sol.
Se levantó al darse cuenta que estaba solo y comenzó a buscar sus bóxers en el suelo encontrándolos bajo de la cama, ¿cómo llegaron ahí?, realmente lo divirtió esa duda.
Su teléfono sonó, era un mensaje de Namjoon.

RM

"Carajo, te necesito en el estudio Min Yoongi, ¿dónde estás? "

                                      Suga
               "No me esperes hasta tarde, estoy ocupado."

El chico apagó su teléfono para evitar más mensajes y llamadas por parte de su jefe y caminó fuera de la habitación siendo cautivado por un olor en particular : "café"
Sonrió de tan sólo imaginarse lo que iba a ver enseguida.

La castaña decidió levantarse temprano y darle una sorpresa a Yoongi, a ella le gustaba cocinar y ¿por qué no demostrarle a Yoongi que lo podía consentir con su comida?
No usaba nada de bajo más que la polera del rubio, le quedaba hasta las rodillas y eso le evitó la fatiga de buscar ropa nueva que ponerse esa mañana.
En la radio sonaba Jailhouse Rock de Elvis Presley y ella comenzó a tararear la letra de la canción mientras movía sus pies al ritmo de esta, definitivamente Yoongi la había dejado completamente feliz, con ganas de gozar la vida aunque esta estuviera hecha un caos, ¡que mañana tan placentera!
Una risa la desconcertó y ella se giró asustada a identificar al culpable, Suga se estaba riendo tiernamente de ella recargado en el marco de la puerta.

-¡Yoongi, qué pena!
-es tu casa, puedes hacer lo que quieras -se acercó a ella hasta tomarla de la cintura y atraerla a él.

Ella sonrió y tapó su rostro con sus manos a causa de los efectos que le causaba aquel chico.

-¿haces el desayuno?
-si -lo miró.

Yoongi alzó las cejas y complació a la castaña con una sonrisa Colgate.

-te ayudaré a poner la mesa -la besó lentamente para disfrutarla mejor y después caminó hasta el lavavajillas para sacar los platos.

El desayuno le gustó a Yoongi después de todo, la chica también supo enamorar su paladar.

-hoy iré por tu teléfono celular
-¿es enserio? -preguntó la chica.
-si
-¡que bien! -sonrió en grande, ya quería llamar a todo mundo cuando lo tuviera en sus manos.

Yoongi dejó el tenedor a un lado, entrelazo sus dedos y tomó posición de pensador, pues lo que estaba a punto de decir lo hacia ponerse tan nervioso como nunca antes.

-_______...

Ella levantó su mirada para ponerle toda su atención.

-lo que dije ayer lo dije enserio, quiero que te quedes conmigo

Ella se puso roja de tan sólo recordar la noche anterior, pero su corazón latió a mil por hora cuando recordó las palabras del rubio.

-claro que me quedaré Yoongi
-pero quiero que sea enserio...quiero que...-pasó sus dedos por su cabello, esto es signo de frustración, lo que estaba a punto de decir jamás lo había dicho en la vida. - quiero que seas mi novia

Ella se quedó sin palabras y Yoongi se puso completamente rojo, sé sintió estúpido, cómo un jodido puberto de preparatoria que confesaba su amor para al final ser mandado a la friendzone o algo similar.

-Yoongi...
-si no quieres está bien, sé que puede parecerte muy pronto

Sonrió nerviosa y se pasó las manos  por su cabello. Estaba realmente nerviosa, le gustaba Yoongi y después de la noche anterior le gustó el doble, pero ¿era correcto decirle que sí?
Yoongi se llevó el vaso de jugo a la boca quitándole importancia al asunto, aunque siendo verdad se sentía dolido, él ya veía venir la peor respuesta; si su chica hubiera
sido la misma de antes es probable que hubiera chillado de emoción y hubiera rodeado la mesa para abalanzarse a sus brazos para decirle un rotundo si, pero la realidad era otra, lamentablemente.

-es difícil para mí, ¿lo entiendes verdad?
-si -fue lo único que le pudo contestar.

Ella se quedó pensativa, un sentimiento extraño nació en su pecho, era parecido a la nostalgia aunque no quería llorar frente a yoongi pues era probable que él pensara que ya había sido suficiente de tanto llanto durante estos días.

-pero vamos a intentarlo Suga...

El rubio la miró, estaba completamente feliz pero en sus adentros no estaba tan seguro de que ________ realmente quisiera intentarlo.

-no te veo segura, creo que lo mejor es que lo pienses un tiempo
-no...creo que es lo mejor, si voy a seguir viviendo en tu casa y...-el color rojo pintó su cara por completo. - besándote, creo que lo mejor es hacerlo de la manera correcta, ¿no lo crees?

Yoongi sonrió por la ternura que le causaba esta pequeña escuálida, de verdad ¿por qué la quería tanto?

-me queda claro -contestó el rubio, sobre todo por la experiencia.

Miró su vaso, ¿ahora que se suponía que debía hacer?, ¿besarla? ¿Abrazarla? Decirle
¿"gracias por aceptar"?

-deberías bañarte, saldremos hoy -dijo Yoongi con la voz autoritaria y levantándose de inmediato de la silla para ir a tomar una ducha en el baño de su recámara.

________ se quedó sin habla, ¿había hecho bien?, ¡por supuesto que sí!
Al fin era novia de Min Yoongi y eso a pesar de asustarla la ponía de alguna forma muy feliz, aparte de que era lo correcto pues ella siempre creyó que el respetarse así misma era lo indicado siempre: primero ella y luego los demás, jamás dejaría que un hombre la utilizara o se burlara de ella; aunque según Yoongi y los pocos recuerdos que habían llegado a ella le decían lo contrario...en su vida anterior amó a Yoongi demasiado por lo cual estuvo dispuesta a abandonarlo todo, incluyendo sus creencias de sí misma, se abandonó por completo.
La ducha fue más larga de lo habitual, ¿por qué Min Yoongi la atormentaba tanto estos últimos días?, ¿por qué últimamente le gustaba estar con él a pesar de no conocerlo demasiado?, ¿todo esto es posible?, ¿por qué se sentía tan atacada?
Cada que veía a Suga se le aceleraba el corazón y le temblaban las piernas...realmente la castaña quería desaparecer.

La falda combinaba con su saco, realmente afuera hacía frío por eso también usaba mayas y una bufanda. Min Yoongi también estaba listo, se vistió casual para la ocasión, una cita con la castaña oficialmente como novios, se sentía como un jodido adolescente y eso le molestaba y a la vez le gustaba, bufo frente al espejo y negó varias veces antes de tomar su saco de mala gana y salir del baño. 
La miró retocándose levemente el maquillaje frente al espejo de la recámara, joder, realmente le pareció hermosa y quiso besarla tantas veces fueran posibles, pero no hizo más que acercarse a ella y sentarse a su lado para mirarla con atención recostando su cabeza en sus brazos sobre el buró.

-¿qué haces? -preguntó la chica hecha un mar de nervios.
-no tengo otra cosa que hacer, así que voy a mirarte
-deberías darle alimento a Min Holly
-lo hice antes de bañarme

La voz del chico sonaba tan lenta y profunda, como si de repente fuera a quedarse dormido. Ella siguió haciendo lo suyo, tratando de ignorar a Suga por completo siendo su misión casi imposible.

-¿por qué usas maquillaje?
-me gusta maquillarme
-eres bonita aún así, ¿para qué es esto? -dice de repente tomando el rubor de la chica.
-rubor, se pone en las mejillas -contestó con una leve sonrisa.

Yoongi rió y la volvió a mirar a los ojos sujetando en una de sus manos el envase del pequeño rubor.

-no necesitas esto, te pones roja de todas formas
-Yoongi, deja de decir estas cosas, ¿olvidas que estoy marcada temporalmente por Hyemin?, si voy a salir necesito cubrir esto -señaló los moretes.

Yoongi hizo un leve puchero y asintió.
Cuando ______ terminó de arreglarse, que por cierto tardó una eternidad según Yoongi, ambos salieron del departamento para ir al cine. Yoongi no era muy fanático del cine, él odiaba el ruido y a la gente que  se ponía de pie para ir al baño o por más palomitas, prefería ver películas en su habitación hasta quedarse dormido sin ser molestado por absolutamente nadie; pero ahora tenía a una personita que amaba completamente ese ambiente.
Próximo destino: El cine.

Wine. EuforiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora