Epílogo.

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El embarazo no era lo mejor a partir de los cinco meses, todo giraba en torno al hospital, contracciones y un montón de cambio de emociones por parte  de _____.

Honestamente eso a Min Yoongi le preocupaba, no sabía de que manera tener contenta a su mujer.

Aveces lloraba sin explicación y se molestaba por cualquier mínima cosa, otras veces lloraba en las madrugadas a causa del dolor de las contracciones y otras veces se ponía tan débil que no quería ni comer.

A pesar de todo eso, Min aún no se había hecho a la idea que dentro de poco sería padre, sí, lo tenía claro, pero la verdad es que no se imaginaba cargando a un bebé y dándole mimos para que duerma. Así que mientras la castaña dormía profundamente Yoongi fue a hacer su trabajo, estaba en la sala de estar, encendió su computador, sacó su libreta y algunos otros escritos y se puso sus audífonos.
Namjoon le había dado vacaciones para que se dedicara por completo a su chica, pero a Yoongi le gustaba trabajar y de esa forma dándole 99% a su ahora esposa podía lograr el 1% de su trabajo como productor musical por las madrugadas.

Todo parecía ir bien hasta que...

-¿Yoongi?...

Miró hacia un lado encontrándose así con _____, parecía una niña incluso con esa pancita sobresaliente de Ya ocho meses de gestación.
Su cabello estaba despeinado y aquella bata color rosa pastel que le llegaba hasta las rodillas la hacía ver tan vulnerable como una chiquilla buscando a su mami.

-¿Qué?, ¿te duele algo?

Ella negó.

-¿Tienes hambre?

Ella negó.
Yoongi dejó caer su cabeza en el respaldo del sofá y miró hacia un lado pensativo.

-Mmh, ¿quieres estar junto a mí hasta que termine?

Ella asintió.

-Amor, no puedes, debes dormir a tus horas, recuerda
-Es que...

Ella bajó la mirada y comenzó a jugar con sus dedos.

-Yoongi...

Él comenzó a afligirse y con lentitud se puso de pie, se quitó los audífonos y caminó hasta estar frente a la castaña quien parecía que quería llorar, se preocupó aún más.

-Nena -Frunció el ceño, levantó su barbilla para poder verla mejor. - ¿Qué tienes?, dime, estás preocupándome

La mirada de ____ brillaba cada que veía los ojos de Yoongi, pero era verdad, Yoongi cada vez se ponía más guapo mientras que la panza de ella no dejaba de crecer, últimamente se sentía poco atractiva, nada le quedaba y Yoongi tenía que comprarle camisones más grandes para que estuviera cómoda, la atendía y cuidaba pero...ya no la tocaba, no de esa forma.

-Tócame

Yoongi la miró confundido.

-¿Qué?

Un puchero se formó en los labios de ___.

-¿No soy atractiva para ti?
-¿Qué?
-Contéstame, ¿Ya no me deseas?

Yoongi la miró con el ceño fruncido, estaba comenzado a molestarse. Por supuesto que era atractiva para él, por supuesto que la deseaba, cada puto segundo, pero si no la tocaba era porque tenía miedo no poder parar y lastimarla.

-No digas tonterías ____, por supuesto que te deseo
-¿Entonces?, ya ni siquiera me tocas...

Una lágrima recorrió su mejilla la cual limpió rápidamente con la manga de la bata para dormir.
Yoongi sonrío con ternura.

-Nena..., ven aquí

Sus brazos van a rodear a su chica atrayéndola a él.

-Vamos al cuarto

Aquella voz le erizó la piel a la chica haciéndola sonreír y limpiarse las lágrimas.

-¿Seguro?
-Seguro nena, anda

Wine. EuforiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora