23. fruto

4.2K 288 165
                                    

En mis ojos, solo puedo ver el color blanco. No están ellos completamente abiertos. Están apenas así, y me duele mucho parpadear. Es como si alguien hubiese clavado un tenedor dentro de ambos y ahora mismo, cada vez que parpadeo, me pincha como miles de agujas dentro de mi iris.

Los brazos me duelen. Las costillas me duelen. No puedo tragar con facilidad, todavía siento a sus manos sobre mí. Siento como me asfixiaba, como me dejaba sin respiración alguna. Recuerdo cuando intentó ir hacia otra instancia conmigo, al punto de querer tocarme a su antojo sin mi aprobación.

Llegó Negan. Las cosas ya empiezan a borrarse en mi cabeza, no es todo con suma claridad como siempre acostumbra alguien a traer un recuerdo a su presente en la mente. No puedo recordar a la perfección que fue lo que pasó. Me cuesta poder hacerlo, pero de algo si estoy segura, y es que todo acabó.

Todo, absolutamente todo.

— Hey. — Daryl está duchado. Él aparece por la puerta de mi habitación, mientras cruza de ella con una pequeña, muy pequeña sonrisa en sus labios y se acerca hacia los míos, depositando un cálido y corto beso que no dura ni dos segundos, alejándose de mi para ir hacia el clóset y tomar una camisa de él. — Ya está. ¿Haz visto que volví?

— No estoy para bromas. — me acomodo con cuidado sobre la cama, quejándome. Daryl resopla forzadamente y de mala gana, se coloca su camisa. Siento tratarlo así, porque él no tiene la culpa de absolutamente nada aunque lo crea él así. No quiero hacerlo. Es una de las pocas cosas valiosas que me quedan en este mundo, y no quiero que se enoje conmigo así como así. — Perdón, Daryl.

— Jules, tú no me debes pedir perdón de absolutamente nada. — gatea desde la punta de la cama hasta mi lado, poniéndose de costado. Yo, con cautela, giro mi cabeza hacia la derecha, observándole a sus ojos directamente. Su pulgar calienta a mi mejilla que se encontraba sumamente fría, mientras que con su otra mano toma de la mía y se lleva el dorso hasta sus labios, dando pequeños besos sobre mi piel. — No te puedo ver así, joder.

— ¿Que pasó con Negan después de... después de todo? — apenas le digo el nombre del líder de los Salvadores, su rostro es todo un poema. Él parece estar molesto, como si no se hubiese esperado nunca mi pregunta.

— ¿Por qué tanto interés en él? — sin embargo, no es frío en su trato. Él sigue acariciándome la mejilla, mirándome con esos ojos azules que tanta paz me dan. — Sigue siendo un hijo de puta, no te fíes tan fácilmente.

— Lo sé, Daryl. Sé que él sigue siendo un hijo de puta y que en lo absoluto podría confiar en él, pero no sé. Fue todo... raro. Tengo las cosas confusas en mi cabeza. Siento que me ha dicho algo importante, y no puedo recordarlo.

— ¿Algo importante?

— Si. No sé. Me duele la cabeza. — me quejo, y él viene hacia mí, dándome un beso en mi sien, haciendo que yo recueste a mi cabeza sobre su pecho, cosa que hago de inmediato.

El recuerdo de Shane siendo golpeado por el bate de Negan, el cual tenía a su poder Daryl, viene de inmediato a mi mente, haciéndome doler.

No tengo lástima por él. Tengo lástima por el pequeño que, durante todo este tiempo, se hizo ideas totalmente falsas y ahora mismo se piensa que su verdadero padre, es él. Cuando en realidad su verdadero padre es quien ahora se encuentra a mi lado.

— Jax. — digo yo en un hilo de voz. Puedo sentir como es que Daryl traga en grueso. — Tengo que hacerlo, Daryl.

— Tú no lo harás sola, Julianne. No lo voy a permitir, y lo sabes.

— Claro que lo sé, Daryl. Realmente lo sé a la perfección. Pero es que todo es muy compl...

Dejo de hablar en el momento que la puerta cruje lentamente, mientras veo como es que Jax asoma su cabeza por ella, mirándome.

RIGHT NOW. © +18 (T.2 BEFORE) (DARYL DIXON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora