Una semana después.
Miro como Jax descansa sobre mi pecho, mientras me abraza él con fuerza, respirando con tranquilidad, dándome la paz que desde hace una semana me hace falta.
— Caleb... no, Caleb. — titubeo asustada, intentando soltarme del agarre de Negan. Simon sostiene la pistola con la cual le ha disparo sobre su mano derecha, viendo todo como si ni siquiera le afectara un poco. — ¡Eres un hijo de puta! — empiezo a moverme como loca sobre el cuerpo del líder de los Salvadores. Él aprieta mucho más a sus brazos, haciéndome sentir como el aire se me dificulta sobre mis pulmones. — ¡Te he dicho todo y así me pagas!
— Julie, para. — él parece estar dolido. ¡Simula estar mal!
— ¡Suéltame!
Apenas grito aquello, cuando me giro, veo como una pequeña silueta se encuentra de mi lado derecho. Con miedo, temiendo a lo que pueda llegar a ver, negándome a creer que es él, todo se confirma en mis ojos.
Jax se encuentra allí, caminando con sus pasos lentos hacia mi dirección, poco a poco, notando como la sangre sale del cuarto donde ha ocurrido todo.
— Llévate ya mismo al niño. — dice Negan rápidamente. Simon quiere ir por él, pero yo, dando buenos y ágiles movimientos, logro zafarme del maldito agarre de Negan, corriendo hacia el cuerpo de mi hijo, quien empujándome con sus pequeñas manos, haciéndome caer al suelo dado a que he quedado de cuclillas solo por querer abrazarle, de aquella forma, logra ir hacia donde Caleb se encuentra, y lo ve todo.
Absolutamente todo.
Me ha dolido demasiado ese momento. Todavía sigo escuchando a sus gritos en mi cabeza. La manera en la cual le pegó prolongadas veces a Negan, a Simon, cuando intentó ir hacia el cuerpo de su "tío" para abrazarle pero yo pude detener de que no lo haga... todo aquello, me ha echo doler demasiado.
El día es negro. El sol ya no se encuentra y la luz esta desapareciendo a gran escala. Jackson me abraza con fuerza, solloza como yo, mientras vemos como los árboles del bosque que nos rodea va a gran velocidad.
Negan se encuentra delante de nosotros, conduciendo. Él me mira de reojo por el espejo retrovisor, pero yo lo único que hago es llorar. ¿Como puede ser que todo haya pasado tan de repente? ¿Como es posible que ahora mismo Caleb se encuentre muerto, sin alma en su cuerpo, en el maletero del coche en el que estamos viajando? ¿Por qué?
Todo es mi culpa. Si no me hubiese ido, si hubiese quedado en Hilltop... nada hubiera pasado. Pagó mis platos rotos cuando ni siquiera se lo merecía. ¿Que fue lo que hice tan mal? ¿Por qué me merezco todas estas cosas cuando en realidad ni siquiera debo merecerlas?
Caleb no lo merecía. Ni ahora, ni nunca.
— Si quieres mañana puedo llevarte tus regalos, Jax.
— No quiero nada. — dice con su voz quebrada, mirando hacia delante, hacia la nada misma en sí. Él soba su pequeño pulgar por mis nudillos, mientras se aferra con muchísima fuerza a mi cuerpo. — No quiero nada tuyo.
— Muchacho, hay cosas que ni siquiera abriste. Sé que van a fascinarte y además, cuando vaya a Hilltop podremos jugar juntos y...
ESTÁS LEYENDO
RIGHT NOW. © +18 (T.2 BEFORE) (DARYL DIXON)
FanfictionCuando crees que todo acabó, cuando piensas que ya nada será como antes, algo o alguien te impide que sigas creyendo en aquello, y te arruina todas las expectativas. Pues a mi me hizo eso él. Y sí, las arruinó. Pero las arruinó de la mejor forma pos...