Especial día del padre. (PARTE 2)

2.4K 174 62
                                    

Me mira expectante. Siento su respiración chocando sobre mi rostro, la manera en la cual me observa me intimida, y sinceramente, me urge la necesidad de sentirlo ahora mismo.

Es por aquello que me acerco más a su cuerpo.

Su mano aprieta con suavidad de la mía. Supongo a que debe de tener temor, miedo y muchos nervios.

No hablamos. No sentimos la necesidad de hacerlo, porque realmente sabemos a la perfección que las palabras estarían demás.

Es por aquel motivo que nuestros labios se unen de una buena vez.

Nuestras bocas están pegadas, inmóviles. Siento como pasa saliva. Yo también lo hago.

Abro apenas a mis ojos y tras verlo, subo a la mano que me sostenía hacia su cabeza, para hundir mis dedos sobre su mata rubia y profundizarlo más todo.

Abro mi boca y sus dientes van directos a mi labio inferior. Aprieto mis muslos ante la corriente eléctrica que siento y respiro forzadamente tras sentir como su lengua se desplaza por la mía y ambos jugamos como dos locos necesitados.

Por inercia, rodeo mis piernas sobre las suyas y e  menos de un segundo, me encuentro tumbada sobre su cuerpo, con mi pecho chocando sobre el suyo.

Las manos de él bajan por mi espalda y se plasman en mis caderas. Al acomodarme mejor, puedo sentir en la fricción que nuestros cuerpos hacen como su miembro se frota contra mi sexo, estremeciéndome de pies a cabeza.

La realidad golpea a mi puerta y los recuerdos de la noche en la cual me confesó haber estado con Tessa llega a mi mente, tal como también aquel momento en el cual estuve a punto de irme hacia otra parte tras cortar mis venas y tomarme una tableta de píldoras mezcladas con vino.

— No. — rápidamente me alejo de él y me quedo sentada sobre su regazo. Su pecho sube y baja con muchísima aceleración y él me mira completamente confundido.

Estira su mano para encender la luz de su mesa de noche y siento un fuerte ardor en mis ojos.

— ¿Te duele algo? ¿Hice algo mal, Jules?

— Yo... Yo no... Es que no puedo, Daryl. — intento contener el llanto pero los impulsos son mucho más fuertes y me hacen fracasar al instante. Niego unas cuantas veces con mi cabeza, culpándome a mi misma por haberle permitido besarme para luego, acabar con el corazón más roto de lo que ya se encontraba. 

Daryl pasa las yemas de sus pulgares por mis mejillas y, con una sonrisa rota y dolida, me toma de las caderas y me obliga a posarme sobre la cama nuevamente. 

Se sienta sobre el borde de la cama, quitándose de encima las colchas. Apoya sus puños contra el colchón, respira con fuerza una y otra vez, y tras ponerse de pie, noto como camina hacia la puerta. 

— Intenta dormir, Jules. 

— ¿A donde irás, Daryl? — pregunto con miedo. 

— Creo que es mucho mejor que te dé tu propio espacio. Así que prefiero hacerlo y ya no dañarte más. Lamento demasiado no ser lo que tú pretendías. Lo lamento mucho, Jules. 

Y entonces, se va, dejándome completamente sola. 

Y aunque todo esto duela, por una extraña razón, lo necesito conmigo. 

¿Por qué lo juzgo tanto, si a fin de cuentas, sé que me dice todo el tiempo la verdad? 

El cerebro me juega una mala pasada, pero el corazón me pide a gritos que le dé una oportunidad. 

¿Acaso tendré que dejar que el tiempo lo solucione a su manera? 

Joder. 

Que complicado que es todo esto, carajo.

RIGHT NOW. © +18 (T.2 BEFORE) (DARYL DIXON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora