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Aizawa se quedó en silencio durante un rato. Se acomodó mejor al lado de la niña y  preguntó.

-¿Que quieres decir con eso ?- Vió como ella bajaba la mirada.

-Te contaré todo así que por favor solo escucha y no digas nada hasta que haya acabado. ¿Lo prometes? - Aizawa suspiró. Ciertamente escucharía algo que no quería, pero era su deber ayudarla, o intentar hacerlo.

-Si… - Susurró mientras ella lo miraba sonriendo.

- Bien. - Dijo acomodándose y comenzó con su relato.- En resumidas cuentas, besé a Bakugo y a Kirishima por error. Cuando conocí a Bakugo me desagradó pero después supe que podía llegar a ser un poco amable . Kirishima es muy bueno y amable, demasiado para mi gusto. Hace rato, estaba soñando, aunque no fue un sueño, Bakugo me mordió, cuando desperté Kirishima estaba aquí hablé con él, llegó Bakugo y comenzaron a pelear, entonces solo les grité y les dije que los odiaba cuando en realidad no es así, ahora me siento muy mal y no sé qué hacer, ellos deben odiarme. - Habló de forma rápida y casi sin respirar. Aizawa parecía no haber entendido o al menos desearía no haber entendido. Harumi al volver a recordar lo que les había dicho a esos dos, volvió a llorar.

-Deja de llorar. - Aizawa se masajeaba la nuca y cerraba los ojos intentando contener su instinto de madre.

-Pero ellos… - Sollozó la niña con mocos en la nariz.

- ¡Deja de llorar!- Ordenó ésta vez.

-¡si! - La muchacha automáticamente había dejado de llorar y ahora lo observaba esperando a que dijese algo.

-Intentaré pasar por alto absolutamente todo lo que dijiste.- Comenzó a hablar un rato después. - Solo voy a decir que hagas lo que hagas solo trates de no llorar más. Esos chicos pueden ser algo niños todavía pero , si en verdad les importas no deberían odiarte. Y la próxima vez mide tus palabras antes de hablar. Más en una situación así. - El rostro intimidante de Aizawa hizo que Harumi se pusiera derecha y prestará suma atención a lo que le había dicho.

-¡sí señor!- Contestó ésta de forma inmediata. Bajó la cabeza y continuó.- Pero, tal vez lo hice de forma consiente.- Aizawa se sorprendio por  ello, antes de que él pudiera decir algo ella continuó.- Pensé que tal vez así ellos dejarían de pelear por mi culpa y seguirían siendo amigos… - Aizawa sonrió ante la buena intención de la pequeña. En otro momento no le habría importado herir los sentimientos de los demás, pero ahora, se preocupaba por lo que dos muchachos pensaran de ella.

-Mira, Harumi. Esto solo reforzará la amistad de esos dos. - Reveló Aizawa con una tenue sonrisa.

-¿Eh? - Musitó Harumi alzando la vista hacia el panda.

-La amistad entre hombres es diferentes a las de las mujeres. - Aizawa bostezó para luego levantarse.

-No lo entiendo, nunca tuve amigas, las mujeres me dan miedo. - Aseguró la pequeña encogiéndose de hombros.

-Sé bien eso, pero trata de no entrar en pánico y causar más alboroto. Después de todo estando aquí ya has avanzado mejor de lo que hubiera esperado. - Dijo mientras ponía gotas en sus ojos irritados.

-¿Eh? - La confusión de Harumi se hizo muy notoria por la expresión de desconcierto que estaba poniendo.

-Ah, debo seguir trabajando, vendré más tarde. - Terminando de decir eso salió de la habitación.

-¿A qué, se refería? - Harumi olvidó el porqué estaba llorando y ahora pensaba en las últimas palabras de su padre. 

Una voz la sacó de sus pensamientos.

Una voz tan seria y amable a la vez.

-Aizawa Harumi San. - Su voz tan hermosa como lo era su rostro.

-¿Todoroki San? - Y las cosas desconcertantes seguían pasando.

¿Qué estaba haciendo ahí Todoroki?

7w7

Ojalá yo tuviera un padre como mamá oruga.

A mi papá le llego a contar algo parecido y me tira un chanclazo :'v

Creo que Harumi traumó a mamá oruga XD

En fin hasta la próxima.

*Luzmala*

La Hija Del Sensei.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora