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Cercana la media noche la muchacha despertó.
Escuchaba como la lluvia comenzó a caer, primero lentamente, pero luego se convirtió en una tormenta.

Se removió en la cama, inquieta. Pero al ver que no podría volver a dormir, decidió levantarse e ir por un poco de leche tibia.

Llegó a la cocina de los dormitorios y abrió la heladera en busca de leche. Cuando cerró la puerta soltó la leche del susto que se dió.

Todoroki estaba frente a ella, había atrapado el envase en sus manos.

-No vuelvas a asustarme así...

En verdad su corazón estuvo a punto de salir de su pecho. El joven le devolvió el envase y ella se dedicó a preparar la leche para poder irse a dormir lo antes posible.

-¿No puedes dormir?-el joven se quedó a su lado todo el tiempo. Harumi intentaba no mirarlo, puesto que solo llevaba una remera manga corta y unos pantalones cortos, su cabello despeinado y el rostro de haberse despertado hace un momento. Realmente hermoso.

-No. Pero luego de beber esto, iré a dormir, o al menos intentar hacerlo.- la mirada penetrante y seria que sentía sobre ella, la hicieron voltear-¿Quieres un poco también?-una sonrisa tenue apareció en ese hermoso rostro y solo asintió. Harumi de la impresión volvió a darle la espalda. Ciertamente aquel muchacho era verdaderamente muy hermoso.

Terminó de servir la leche caliente y le tendió un vaso.

Ambos bebieron y al terminar dejaron sobre la mesa los dos vasos.

- Iré a dormir. Adiós.-intentó irse. Era muy noche para hablar con él, más, por todo lo que había pasado. Además la tormenta estaba cada vez peor. Tendría que ir con Kirishima o Bakugo para poder dormir tranquila. Aunque no tranquila, durmiendo con alguno de ellos precisamente...

-Ah...-susurró el muchacho, haciendo que Harumi volteara a verlo-Lo siento.

Harumi no comprendió. Pero después pensó que tal vez y solo tal vez aquel hermoso muchacho le tendría miedo a las tormentas.

-Vamos-le sonrío y tomándole de la remera lo guió a su habitación-. Buenas noches, Todoroki.

Estaba por irse, nuevamente camino a su propia habitación, que en realidad era un intento de habitación, puesto que solo era uno de los almacenes con un futón en el suelo.
Algo la detuvo. Sintió un escalofrío al tacto piel con piel con la mano fría de Todoroki.

-Lo siento...-volvió a susurrar, soltando el brazo de Harumi.

-¿Por qué estás disculpándote tanto?-se abrazó a si misma en el mismo lugar donde todavía sentía el tacto del joven.

-Es complicado...-en verdad es desesperante no poder estar seguro de lo que te ocurre. A Todoroki le estaba ocurriendo eso. Hablando y hablando con Midoriya fue armando el rompecabezas de lo que había pasado. Había besado, por alguna razón que ni él comprendía, a su amiga. Estaba muy confundido al respecto.

- Entonces, ¿Por qué no tratas de explicarlo? - Todoroki frunció un poco todo su rostro intentando pensar. Finalmente entró a su cuarto donde la lluvia no se oía tan fuerte, y la invitó a pasar con un gesto. Ella dudó, pero después aceptó.

Recorrió la habitación con la mirada. Estaba todo muy ordenado, todo muy en su sitio, todo muy Todoroki.

Se sentó y él hizo lo mismo. Estaba bastante inquieto. Cosa que puso a Harumi bastante inquieta también.

-Estoy confundido.-asumió apesadumbrado.

-Esta bien. ¿Qué más sientes?- preguntó ella, como interrogando a un niño pequeño, el cual aún no sabe distinguir entre sus propias emociones.

-Es extraño -respondió de inmediato -. Es pesado. Como molesto. No lo entiendo. Midoriya me dijo que es parecido a la culpa. Pero no creo que sea eso.

-¿Culpa? ¿Por qué sería culpa?- ahora la que estaba confundida era ella.

-Por haberte besado. -Harumi quedó en blanco.

- ¿Recuerdas lo que pasó? - tragó saliva con fuerza.

El asintió- Lo recordé esta tarde mientras hablaba con Midoriya.-Harumi cerró los ojos con fuerza.- Cuando le pregunté si de verdad lo había hecho, se enojó conmigo.-se encogió de hombros.

-Entonces, cuando fueron a disculparse, ¿no sabías porqué te estabas disculpando?- él negó. -Escucha. Claro que él se enojaría. Se supone que esas cosas ya deben quedar en el pasado. Para él es una herida aún fresca y tú solo le echaste sal.

-Pero él no tenía ninguna herida. Tampoco había sal aquí.- respondió frunciendo el ceño.

-No me refiero a literalmente.- ella suspiró- Me refiero a que, Midoriya te quiere, ¿tu también lo quieres a él verdad?-el muchacho asiente-Muy bien. Entonces el hacerle recordar que tú y yo nos besamos le hará daño. Por eso debes no mencionarlo en el futuro, ¿entiendes?

-Entiendo. Pero fue un beso. ¿Está mal besar a alguien que te gusta?- como un niño pequeño, que no entiende absolutamente nada todavía, se atrevió a soltar tal cosa sin medir sus palabras. Dejó a la muchacha en blanco, sin palabras.

Todoroki solo era alguien inocente, alguien sin maldad, pero si Midoriya llegaba a oír semejante cosa, sin duda lo lastimaría. Gracias al cielo estaban solo ellos dos en aquella noche tormentosa.

Harumi volvió en ella cuando él se le quedó viendo. Se espabiló sacudiendo su cabeza y de paso ordenó sus pensamientos.

-Todoroki. Responde una pregunta siendo lo más sincero que puedas- aunque pedirle más sinceridad al joven que era cien por ciento sinceridad era algo imposible. Él asintió apacible- ¿Qué sentimientos tienes hacia mí?

Todoroki no cambió en lo absoluto su sereno rostro. Llevó su mano a su barbilla y pensó durante un largo tiempo, que para Harumi fue eterno.

- Lo que yo siento por Harumi, es que me gustas.-sintió que se desmayaría justo en ese mismo momento.

¿Había escuchado bien?

¿Sus oídos lo la estaban engañando?

¿Acaso Todoroki no era joto?

¿Qué diablos estaba pasando aquí?

La tormenta se tornó aún más violenta volviéndose una tormenta eléctrica. La habitación se iluminó con la luz de un relámpago.
Y un trueno se oyó después haciendo retumbar los vidrios de aquella ventana. La muchacha se hizo bolita chillando para sí misma. No era muy fanática de las tormentas eléctricas. Los ruidos la ponían nerviosa, y justo ese momento no era el más indicado para seguir estando nerviosa.

Cuando se dio cuenta, estaba nuevamente en su habitación. No supo en qué momento fue que se fue del cuarto de Todoroki. Tampoco si se despidió siquiera. Solo que había salido de ahí. No pudo dormir durante toda la noche. Por lo que ese fin de semana estuvo durmiendo durante todo el día. Y con la excusa de sentirse mal por "cosas de mujeres" se evitó el ver a Bakugo y Kirishima y claro que a Todoroki también, pero tarde o temprano debía enfrentarlo. Y preguntar si, así como Mina había malinterpretado a Kirishima, ella también malinterpretó todo y entendió cualquier cosa. Y rogaba al cielo que así fuera.

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¿Qué está pasando doctor García?

*Luzmala*

La Hija Del Sensei.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora