2: Encuentro brusco.

9.9K 756 178
                                    

Harumi se encuentra corriendo por los pasillos hasta que al doblar a una esquina choca con algo duro y blando a la vez. Cayendo al suelo bruscamente.

- Maldición, eso duele...- Se quejó mientras intentaba reponerse del golpe.

-¡Maldita mocosa, mira por donde vas si no querés terminar hecha cenizas!- La voz tajante de Bakugo resonó en los oídos de Harumi. Haciendo que se le pusieran los pelos de punta.

-Espera, Bakugo. Ella es la chica.- Kirishima aparece a escena.

-¿Ah? ¿De que demonios hablas?- Bakugo se detiene a observar con detenimiento a quién había chocado con él. -No tengo ni endemoniada idea de quién es esta mocosa.

Harumi frunce el ceño.

-Es quien estaba con Aizawa sensei hace un rato.- Bakugo cambio su expresión a una de completo desagrado.- Por cierto,- Kirishima se acerca hasta Harumi, que aún permanecía en el suelo.- Soy Kirishima Eijiro.- Y le tiende la mano sonriendo.

Harumi sostiene gentilmente la mano del pelirrojo y se levanta.

-Soy Harumi...- Aún estaban tomándose de la mano, cuando Kirishima comienza un movimiento arriba/abajo estrechando la mano de quién acababa de conocer.

-Por cierto, él es Bakugo.- Harumi observa al rubio y este chasquea la lengua.

Bakugo comienza a caminar, pasando por en medio de ellos. Haciendo que se soltaran bruscamente.

- Ah, Kirishima-kun. ¿Sabes dónde está el panda?- Kirishima se muestra sorprendido a la vez que confuso. A Harumi le pareció una mirada lo suficientemente linda como para terminar comparándolo con un cachorrito. Por lo que ella cambia su pregunta para que el lindo cachorro lo entendiera. -¿Sabes dónde está Aizawa Shota?

-En la sala de profesores.- Sonríe finalmente entendiendo.- ¿Quieres que te llevemos? No pareces familiarizada con todo aqui.- Con toda la amabilidad propia de el pelirrojo prestandose, a sí mismo y a su amigo a hacer de niñeras.

-¿Llevaremos?- Bakugo alzando una vez más la voz se acerca a tomar por el cuello de la camisa a Kirishima.

-Me encantaría decir que si y molestar al rubio de mal carácter...- Bakugo envía una mirada asesina a la muchacha.- Pero no me interesa.- Las palabras de la muchacha desconcertaron a ambos chicos.

-Que no te interesa, dices.- Bakugo suelta el cuello de la camisa de su amigo y camina hasta posarse en frente de Harumi. Un silencio aparece después de aquello.

En ese enfrentamiento se ve la diferencia de altura entre ambos. Mientras que Bakugo rondaba el metro setenta, Harumi apenas si llegaba al metro cincuenta.

Con una diferencia más que notable, la muchacha le plantaba cara al rubio.
Cosa que Kirishima encontró como algo bastante idiota, pero genial a la vez.

Harumi le sostiene la mirada a Bakugo y este poco a poco cambia su mirada a una más feroz.

-Vamos Bakugo deja de jugar.- Kirishima intenta intervenir.

- Tu no te metas pelos parados o te mataré a ti primero.- Advierte Bakugo preparándose para hacer explotar su nitroglicerina.

-¿Vas a seguir hablando o vas a actuar? Me estoy aburriendo de esto.- Harumi bosteza llevando su mano derecha a su boca.

-Tu... maldita...- Bakugo se ve fuertemente interrumpido por un gruñido.

El estómago del rubio reclamaba por algo de comer.

-Bakugo... ¿Tienes hambre?- Kirishima intenta contener su risa pero le es imposible. Y comienza a reír a carcajadas.

-Maldito bastardo deja de reírte, y vamos a comer algo.- El pelirrojo continúa riendo. Y volviendo a dirigirse a Harumi se acerca a tomarla por el cuello de su ropa. - Tu, estás muerta.- Soltándola comenzó a caminar. Guardó sus manos en los bolsillos de su pantalón y desapareció en las escaleras.

Kirishima posa su mano en el hombro de la muchacha mostrando así su apoyo. Y le sonríe animadamente.

-Bueno, fue un verdadero placer. Nos vemos. Si sigues con vida después de esto, nos volveremos  a ver.- El pelirrojo se echó a correr para alcanzar a Bakugo. Dejando a Harumi allí.

La muchacha, que no supo cómo reaccionar se revolvió su oscuro cabello y lanzó un suspiro.

-Bien hecho Harumi... Probablemente acabas de cavar tu propia tumba...- Mirando hacia dónde ambos muchachos habían desaparecido volvió a suspirar. - A juzgar por su actitud, acabo de joder a quien no debí. Bakugo, eh... Estoy muerta.

Terminando de hablar consigo misma vuelve a encaminarse a encontrar al panda.

7w7

Nuevo capítulo

Espero que les guste n.n

Me despido hasta pronto :-*

*Luzmala*

La Hija Del Sensei.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora