Prince Of France | Shawn Mendes

Capítulo 22: Matalos con amabilidad

(Mesa en la que se sientan en multimedia)

Iman

Shawn sacó la silla para que me sentara y luego se sentó a mi lado. Estábamos al principio de la mesa, justo al lado de la silla más grande que se mantenía intacta.

Era una mesa muy larga que estaba debajo de varios candelabros de oro. Nuestra mesa era la más alejada de las demás y también parecía ser la más importante.

La reina se sentó frente a mí y Shawn, en el lado izquierdo de la mesa. La mesa se quedó en silencio cuando un hombre que estaba de pie, con cara seria y traje blanco, se sentó en el primer asiento.

Me incliné hacia Shawn. —Él es..

—Mi padre, el rey Manuel, sí —me susurró. Yay, eso me pone menos nerviosa.

Sinceramente, siento que no debo estar sentada aquí. Todos estos ojos curiosos me hacen sentir insegura hasta el final. Todas estas hermosas personas ricas y reales a mí alrededor y.. es solo una sensación incómoda.

A continuación, Victoria se sentó al lado de la Reina y, lo que parecía ser otra familia, se unió a la mesa.

Otra chica que tenía cierto parecido se sentó a su lado. Entonces supongo que están relacionadas.

Luego Blake me sonrió y tomó asiento a la izquierda de Shawn.

Desde mi visión periférica, vi que la mirada de Victoria sobre mí se estrechaba. —Será mejor que sea una broma.. —murmuró apartando su mirada de mí.

¿Cuál es su problema? Acabo de llegar y ya tiene esa actitud.

Su hermana o lo que sea, susurró algo al oído de Victoria.

Fruncí el ceño. Y pensé que llevar este vestido no me haría una marginada. Quiero irme a casa, para ser honesta..

—¿Comemos? —preguntó la voz profunda que me asustó, sentado a la cabeza.

Créeme cuando digo que estoy intentando todo para evitar el contacto visual con el padre de Shawn, puedo sentir la gran potencia que irradia de él.

Todos asintieron con la cabeza y estuvieron de acuerdo, y supongo que los sirvientes vinieron a poner comida y bebidas sobre la mesa.

—¿Agua o vino? —me preguntó una joven con una tímida sonrisa. Ella parecía de 18.

¿Y mis únicas opciones eran el agua y el vino? Wow, que extraño lugar.

—Agua estaría bien, muchas gracias —dije sonriéndole.

Me miró divertida, luego asintió con la cabeza y pasó a la siguiente persona. Las conversaciones de todos cesaron cuando me miraron. Incluso Shawn me miró, pero pareció divertirle y sonrió.

Ummmm.. ¿qué?

¿Le gustó avergonzarme o algo así?

Cuando casi todos volvieron a sus conversaciones, toqué el hombro de Shawn.

—¿Sí, Iman? —preguntó bajando la cabeza para que pudiera hablar con él.

—¿Por qué me miraste así? —espero que no se esté convirtiendo en una de esas personas.

Él sonrió. —Fuiste muy amable con la criada.

—¿Eso es malo? —le pregunté. Quiero decir, yo sirvo a la gente también. Trabajo en una cafetería por el amor de Dios.

—No, no lo es. Pero no es muy común por aquí —dijo.

—¿Madam? —escuché a alguien decir. Por el rabillo del ojo vi a la reina y al rey con la mirada en nosotros.