Prince Of France | Shawn Mendes

Capítulo 30: Fuiste advertido

Dos semanas después

Shawn

Mi padre y yo no hemos estado en buenos términos desde ese día en la mesa del desayuno.

De todas formas, no me importaba. No veo lo malo en lo que estoy haciendo. Si él quería seguir metiéndose en mis asuntos, entonces la hostilidad solo seguirá creciendo.

Y claro que continuaría haciendo lo que quería hacer. Finalmente estoy con Iman y no voy a renunciar a ella sólo porque mi padre no lo apruebe.

Siempre me enseñó a ser un hombre de palabra y ahora soy un criminal por ello.

Pero de todos modos, mientras cuente con el apoyo de mi familia, estaré bien.

Iman y yo iríamos al cine hoy. Ella dijo que quería salir más de la casa. Me ofrecí a ir de compras con ella, pero me llamó sexista porque asumí que eso es todo lo que hacen las mujeres.

Me reí por la forma en que usaba la palabra, sexista. ¿Cómo es ser sexista si solo quisiera ir de compras contigo? Ella dice que usa la palabra libremente por efecto. Sabe el significado de la palabra pero pensó que sería divertido usar la "discriminación de género"

Pero de todos modos, será mejor que me vaya.

Cuando llegué a la entrada principal del palacio, dos guardias me detuvieron.

-No podemos permitir que pases, nuestro príncipe -el más alto dijo inclinándose.

-¿Y por qué no? Debo estar en otro lugar -dije tratando de rodear al guardia, pero él se quedó en su lugar.

-Príncipe, no te dejaremos pasar -dijo el segundo guardia.

Estaba perdiendo mi precioso tiempo y comenzaba a molestarme mucho.

-Soy tu príncipe. Obedéceme y déjame pasar -dije lentamente.

-Mi príncipe, fuimos autorizados por el rey para no dejarte salir de los terrenos del palacio.

Increíble.

Me aparté de los guardias. -Maestro Shawn-

Corrí hasta el balcón donde sabía que estaría mi madre.

-Shawn.. -sonrió ella.

-¿Madre, cuál es el significado de esto? -la corté rápidamente.

-Shawn, ¿de qué estás hablando? -preguntó caminando hacia mí.

-Fui a la entrada del palacio y los guardias no me dejaron pasar -dije apretando mi mandíbula después de la frase.

Ella suspiró. -Tu padre está muy molesto.

-Mamá -dije con severidad. No me importaba lo que mi padre estaba sintiendo. Ella sabía que no me importaba lo que él estaba sintiendo.

-¿Y qué es lo que quieres que haga? -preguntó ella cerrando los ojos conmigo.

-Quiero que hables con él. ¡Esto es una locura! Tengo 22 años y estoy bajo arresto domiciliario.

-Shawn, por mucho que me encantaría ayudarte, no puedo interferir con lo que tu padre haya establecido -dijo.

Cerré mis puños.

Iman

-¿Te lo imaginas, Maria? Te lo digo, casi.. -dije pero ella me interrumpió.

-Nunca me gustó Lucy de todos modos. No puedo creer que ella te haya dicho eso -dijo Maria con incredulidad.

-Pues, lo hizo. Nunca supe que ella era así -dije.