Miro a través de la ventana del taxi el paisaje de la ciudad con los auriculares puestos escuchando El patio de Pablo López. Siento un gran nudo en mi estómago, desde que he despertado he sentido esa sensación y eso me suele pasar cuando presiento que algo esta por venir. La verdad no se si bueno o malo.
El taxi llega a su destino y le entrego el coste del viaje. 15 euros por un trayecto de de menos de 20 minutos suerte que no cojo el taxi todos los días estaría arruinada.
Enfrente de mi tengo la imponente entrada al Club de campo. Subo por el caminito de piedra hasta llegar a la entrada de pronto mi zapato queda atrapado y caigo de bruces al suelo. Emma ya estabas tardando en salir tu verdadero yo. Miro a un lado y otro y las personas me miran, algunas ríen por lo bajo. ¿ Qué pasa señora que usted nunca se ha caido? Apuesto lo que sea a que si se cae revota de toda la silicona que lleva. Me levanto como si no hubiese sucedido nada, ignorando a todo el mundo y me dijo hacia la recepción.
- Buenos días.- Me saluda una chica con un traje chaqueta con rayas blancas y negras.
- Buenos días. Tengo una cita con la señora Ferretti.- Si estábamos avisados de su visita- le da una señal a un chico vestido con el uniforme del club - Acompaña a la señorita hasta la mesa de la señora Ferretti.
El chico me guía hasta la mesa y me indica que me siente hasta que llegue la señora Ferretti. Miro alrededor y esta algo cambiado desde la última vez que vine. Desde que me independicé me puede librar de muchas de las fiestas aburridas de alto postín.
- ¿ Te has hecho daño? Voy a pedir que traigan el botiquín.- Una dulce y elegante voz suena enfrente mío.
Levanto mi mirada y allí esta la señora Ferretti. Es pura elegancia con ese vestido color carne con flores bordadas, unos zapatos de tacón en el mismo tono del vestido y su cabello dorado recogido en un elegante moño italiano. Trato de levantarme pero ella me lo impide.
- No te levantes, estas herida- Se sienta a mi lado- ¿Debes ser Emma?
- Si. Vengo a por mi libreta. De verdad no sabe lo agradecida que estoy. En esa libreta guardo grandes recuerdos.
Un camarero trae un botiquín.
- Puedes dejarlo aquí. Yo misma le haré las curas- Abre el botiquín y saca un poco de algodón y lo unta con yodo- La de años que no hacía esto y parece que no se me ha olvidado. La de heridas de mis hijos que tuve que curar sobre todo del pequeño.
- ¿Son mayores ya?
- Si. Todos trabajan en la empresa familiar. A excepción de la pequeña, este año termina el colegio y se irá a la universidad, dice que quiere estudiar diseño.
- Yo estudié diseño.
- Lo imaginé al ver tus dibujos tienes un gran talento.
- Gracias- Me sonrojo.
- Verás Emma me gustaría proponerte algo.- la miro curiosa- Mi marido y yo fundamos una firma de joyas hace ya algunos años, a día de hoy se encargan nuestros hijos. Nosotros aún formamos parte de la junta directiva y seguíamos tomando algunas decisiones. Le mostré a mi marido y mis hijos tus dibujos y nos gustaría que formases parte de nuestro equipo de diseño.
- ¿Lo dice en serio?- Pellizcadme porqué creo que estoy soñando.
- Por supuesto. Tienes un gran talento.
- Ay señora no sabe lo agradecida que estoy. De verdad muchas gracias.- De forma impulsiva le doy un abrazo- Lo siento.
- No te disculpes.- Abre su bolso se piel en tono anaranjado y se una billetera saca una tarjeta y me la extiende- Esta es la tarjeta con todos los datos. Mañana preséntate a las 8 en punto y dirígete a la planta 20 y pregunta por el señor Enzo Ferretti.
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Tú Otra Vez ( Saga Amor Destinado #1)
Romance¿Qué pasaría si años después te reencontraras con el chico del que estabas perdidamente enamorada en tu adolescencia y él jugó contigo? Pues eso me pasó a mi. Max Ferreti era el chico de mis sueños y para él solo fui una maldita apuesta junto a sus...