Narra Max:
Apago la cinta de correr y seco un poco el sudor con una toalla. Estoy exhausto. Me desnudo y tiro la ropa al cesto sin que parezca una bola, Emma lo odia.
La extraño tanto. Me gustaría tanto tenerla aquí, ver día a día la evolución del embarazo. Sé que tarde o temprano volveremos a estar juntos, lo siento de verdad. Pero por ahora necesito sentir que ella confía en mi.
Tras una larga ducha que me deja como nuevo, me dirjo al vestidor. Hoy tengo una reunión con Enzo y un compañero de universidad. Busco un polo color marfil y un pantalón azul marino a juego con los mocasines. Detesto tener que vestir así con el calor que hace.
Su ropa aún sigue allí, con su mismo olor. Soy tan egoísta que me niego a mandarle sus cosas. Siento que si lo hago la estoy perdiendo.
Bajo las escaleras en cuanto escucho el timbre, debe ser el conserje, a esta hora suele subir a entregar el correo certificado o algún paquete.
Abro la puerta y encuentro en el suelo un sobre color salmón. Recojo el sobre del suelo y mientras lo abro, me dirijo a la cocina a prepararme un café. Estoy hambriento.
¡Serás hija de perra Rita! La rabia se apodera de mi cuerpo, siento como cada uno de mis músculos se tensa por momentos. Tomo la taza que tengo entre mis manos y la lanzo a la pared con fuerza. Temo tanto que a Emma y a nuestra niña les pueda pasar algo.
Ya es la tercera semana que recibo amenazas de Rita, esa mujer está totalmente loca y obsesionada conmigo. Me lie con ella en una fiesta cuando estudiábamos, estaba borracho y hecho una mierda por haber perdido a Emma y se aprovechó. Allí empezó a decirle a todo el mundo que estábamos juntos, me seguí a todas partes, si conocía a una chica con la que quería tener un rollo, le jodía la vida, la manipulaba para alejarla de mi. Decía que éramos pareja o bien que yo la acosaba. Conseguí zafarme de ella en cuanto me fui a la universidad.
Conduzco hasta mi destino por la avenida transversal de la ciudad, Carlos, el amigo de mi hermano tiene su oficina en la otra punta de la ciudad.
Subo el volumen de la radio en cuanto empiezan los primeros acordes de The science de Coldplay. Emma ama esta canción. Cuando está tan concentrada pintando en su estudio, le da por cantar y está es una de las que más repite.
Enzo abraza efusivamente a su colega. Hace ya algún tiempo que no se ven. En la universidad tenían muy buena amistad y el trabajo y responsabilidades les han mantenido un tanto alejados.
- Tío cuanto tiempo.
- Ya ves. Te presento a mi hermano Max
- Un placer. Carlos.- Me extiende su mano
- Lo mismo digo.
- Pasad, pasad.- Nos ofrece entrar a su oficina.- Tomad asiento. Mi secretaria ahora nos va a traer algunos refrigerios.
- ¿Cómo te va la vida. Que tal Paula y el peque?- Intenta recordar su nombre
- Gonzalo. Cada día está mas grande. Esta misma semana ha empezado a gatear. Paula y yo hemos empezado a proteger las zonas mas peligrosas de la casa.
- Tenéis que veniros un día a casa. Organizamos una barbacoa. Mía esta como loca por ver a Gonzalo y jugar con él.- Me alegro mucho de vuestra amistad y vuestras familias felices pero estamos aquí para salvar a la mía.
- Tengo nuevo material. Esta mañana he recibido otra foto con otra nota.- Le entrego el sobre.
Llevo ya semanas recibiendo mensajes, fotografías, videos y amenazas, en las dónde se puede ver a Emma haciendo su vida y como alguien la sigue a todas partes. En este último mensaje hay una fotografía de Emma saliendo con su madre de un centro estético y el rostro de ella y su vientre están manchados de sangre.
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Tú Otra Vez ( Saga Amor Destinado #1)
Romance¿Qué pasaría si años después te reencontraras con el chico del que estabas perdidamente enamorada en tu adolescencia y él jugó contigo? Pues eso me pasó a mi. Max Ferreti era el chico de mis sueños y para él solo fui una maldita apuesta junto a sus...