Epílogo: Sí.

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Es solo un botón, es sólo un botón Emma. No pasa nada. Celia vendrá ahora con hilo y aguja.

- Está tardando mucho

- Cariño tranquila vamos bien de tiempo- Trata de consolar mi madre.

Celia entra con un pequeño costurero en la mano y su bebé de ocho meses en el otro.

- Me han dado esto.

- Dame cielo. Yo coso ese botón- Pide mi suegra mientras Celia le da es costurero.

- ¿Sabe coser Claudia?- pregunta incrédula Martina que da el pecho a su niña de tres meses.

- Aprendí de mi madre. Era una gran costurera y siempre me tocaba ayudarla. Ya de más mayor me ganaba un poco de dinero arreglando algunas prendas.

- ¿Alguien ha visto a Julen? Tengo que darle el jarabe.

- Esta en la habitación de los chicos con Jorge. Dice que quiere aprender hacer cosas de hombre mayor.- Explica Alma.

- Este hijo mío.- Niega en un suspiro.- Vigílame a Iker. Así prácticas para el tuyo- Le entrega el bebé a Alma.

Cuatro años, cuatro años han pasado desde el episodio de Rita. Tras ser detenida fue encarcelada en una institución mental diagnosticada con esquizofrenia y trastorno de la personalidad.

La puerta de la habitación se abre, mi cuñada Valentina viene con Luna, esta hermosa con el vestido blanco roto y la corona de flores en tonos rosados y verdosos. Ambas sujetan las pequeñas manitas de mi pequeño príncipe. Bruno apenas a aprendido a andar hace escasas dos semanas y quiere moverse de aquí para allá.

- Estás muy guapa mamá. Eres una pintesa- Me alaga mi pequeña.

- Gracias mi amor. No más que tú.

- Lo sé- Ha sacado el ego de su padre.

- Ay alguien aquí que tiene hambre y quiere a su mami.

Con la ayuda de su tía, Bruno se acerca a mi con una gran sonrisa. Es un clon de su padre en pelirrojo.

Bajo un poco la parte superior de mi vestido para descubrir mi pecho y alimentar a mi pequeño. Elegí un vestido holgado pensando que sería la mejor opción para dar el pecho.

-Ma ma ma- Balbucea mi pequeño pidiendo pecho.

- Ya mi amor. Ya.

Una vez ya le he dado el pecho a Bruno mi madre lo toma en brazos y se sienta junto a él. Nunca imaginé que mamá llegará a ser de esas abuelas que no les importa ensuciarse las manos o tirarse al suelo por sus nieta. Y bueno, desde que le diagnosticaron la maldita enfermedad hace unos meses, está más llena de vida que nunca

Mi suegra corta el restante del hilo y guarda el material que ha usado en el costurero.

- Gracias Claudia. Creí que me daba algo.

- Si supieras todo lo que pasó en mi boda.

Ay que no os he dicho. Hoy me caso! Si por fin. Después de cuatro años al fin Max y yo nos casamos.

Subida a sus inseparables tacones de aguja y enfundada en uno de esos vestidos que marcan hasta la imaginación, librera en mano y pinganillo en la oreja Miranda entra a la habitación. Si Miranda, Miranda de La Riva, la cerebro de botox es mi organizadora de bodas. Hace un par de años montó una empresa de organización de bodas y ya está posicionada entre las mejores del sector.

- Tenemos una super crisis, o sea caos total- La que tiene que estar histérica soy yo, no ella.-Entra.

El grito que pegamos todas las que estamos en esa habitación creo que lo han escuchado todos los invitados. Creo que le diré a Miranda que comunique que está todo bien. Mi hermana, Sofía, tiene todo su vestido, su rostro y piernas cubiertas de lodo, el peinado medio deshecho y lleno de suciedad.

Tú Otra Vez ( Saga Amor Destinado #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora