Llego el día más esperado fuimos a su pequeña casa a embalar todos los objetos, ella y yo nos dirigimos a su habitación mientras nuestro señor se encargaba de las cosas del salón, la pregunte donde tenía las maletas para la ropa, porque cajas para embalar el resto habíamos traído nosotros.
Me dirigí a su armario y empecé a doblar ropa, cuando estaba acabando vi una caja y la curiosidad me mató, la abrí y en ella tenía mogollón de juguetes y fotos de ella usándolos. El calor que me sube en ese momento creo que no se podría describir lo que sentía, deseaba coger las esposas y atarla a esa cama que tanto me llamaba a ser usada por nosotras, asique mande un mensaje a nuestro señor de que subiese la cogí por banda y la esposé, lo que menos nos esperábamos esque tendríamos mirones, un vecino de ella que siempre la miraba desde su ventana hoy iba a quedar asustado, aunque tambien era miembro de una hermandad pero no de la nuestra, sabíamos que había bastantes más pero nunca daban la cara.
Me encontraba entre sus piernas quitándola ese pantalón corto que la hacía un culo de escándalo pero yo iba a ser la que comiese es coño así que inicie mi jugada deslizando su tanga a un lado y dando pequeños toques en su ya hinchado clitoris, me acerqué y le di una tremenda succión ella se retorcía la conocía demasiado bien y estaba muy caliente deseaba que mi lengua se hundiera en su raja que empezaba a chorrear, asique la dije.
- Que deseas mi pequeña zorrita???
- Deseó que me hagas todo lo que no pudimos hacer aquella noche cuando nos interrumpieron y a ti te dieron el castigo extremo.
Vi de reojo a mi Amo en la puerta pero sabía que no iba a entrar por lo que había escuchado.
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Merecidas vacaciones
RandomLe dedico esta historia a una persona que me animo a escribir de nuevo. Muchas gracias Y al resto de lectores que siguen mi relato porfavor dejen sus comentarios muchas gracias por seguirme
