Merecidas vacaciones

Parte 110

Ya había pasado un buen rato desde que le clave el cuchillo seguía retorciéndose en el suelo y yo sentada en las escaleras, saqué fotos y se lo mandé a mi señor y la hermandad con el simple mensaje de " yo he conseguido lo que ustedes no" no hacían más que llegarme llamadas las cuales rechazaba, mi señor al no responderle me mandaba audios y también vídeos preguntando que donde estaba, que si estaba bien y muchas cosas mas, pero lo quemé excitaba esque me decís que cuando me pillase me iba a estar castigando durante días.
Me baje de las escaleras y le dije.
- Se pasa mal cuando estas en un estado inferior no??? Pero tranquilo tu sufrimiento acabará pronto y te pudrirás en el infierno de donde no debiste salir.
En ese momento vi como mi teléfono cobraba vida pero eran las cámaras, mire en todas y vi a a todos los maestros, a mi señor y a mi niña, como demonios nos habían encontrado es verdad uno de los compañeros de la hermandad nos instaló la seguridad de casa asique podía piratear mi sistema.
Tenía que darme prisa sino entrarían y no podría acabar con el, cogí la daga gemela que tenía grabada en la espalda y se la enseñé.
- Ahora si veo el terror en tus ojos con esta misma daga intentaste matar en 2 ocasiones y una casi lo consigues, pero este es tu final.
Pase la daga de lado a lado de su garganta y vi como se desangraba, escuché como forzaron la cerradura para entrar había apagado la alarma para que no saltara y en ese momento escucho.
- Que has echo.!!!!
- Lo que tenía que haber sucedido hace tiempo pero no tenía el valor necesario, una cosa es que me amenace a mi y otra muy seria que ya amenace a mis seres queridos.
Tenía tanta adrenalina en el cuerpo que no me había dado cuenta que estaba de rodilla en el suelo y llorando, en ese momento escucho decir.
- Esta muerto, lo a matado a sangre fría.
- Le he matado si y si quieren acusarme a la policia iré a la carcel pero fue en defensa, ustedes le tuvieron encerrado por semanas y se les escapó perdieron su pista y yo supe localizarlo.
- Niña estate tranquila no va a pasar nada nosotros no diremos nada.
Solo me quedaba hacer una última cosa, pedí a todos que salieran y abrí todos los conductos de gas, era una casa alejada asique tardarían en llegar, deje un reguero de gasolina hasta la entrada y lancé una cerilla no supe si lo había dicho en alto.
- Por fin puedo cerrar una etapa de mi vida, esta casa solo me creo sufrimiento.
Estaba llorando y temblaba solo noté que alguien me puso una manta por encima y caí en una nube negra.