𝐌𝐈𝐍 𝐘𝐎𝐎𝐍𝐆𝐈, 𝐑𝐄𝐀𝐂𝐓𝐈𝐎𝐍𝐒.

━━━ 003

— ʟᴀ ʀᴇᴀᴄᴄɪóɴ ᴅᴇ sᴜɢᴀ ᴄᴜᴀɴᴅᴏ ᴛɪᴇɴᴇ ᴜɴᴀ ᴘᴇsᴀᴅɪʟʟᴀ.

SunHee balbuceó algo incomprensible mientras Yoongi seguía empujándola suavemente. —Por favor, despierta—, susurró el chico consiguiendo que su novia finalmente lo escuchara y se obligara a sí misma a abrir los ojos. Giró su cuerpo para quedar frente a frente con Yoongi, detrás de él pudo ver el reloj en la mesita que marcaba las cuatro de la mañana, ¿qué había ocurrido?

—¿Qué pasa?—, murmuró adormilada, pero lo suficientemente despierta como para ver en los ojos de su novio que algo andaba mal, este pasó su brazo por la cintura de la chica atrayéndola a su cuerpo para abrazarla contra su pecho, siempre amaría hacer eso.

—Te amo, solo eso, quería que lo supieras.

SunHee se separó de él lentamente hasta poder verlo a los ojos, —¿Qué pasa?

—¿No puedo amarte?—, sentenció Yoongi a la defensiva logrando que SunHee sonriera.

—No es eso. Yo también te amo. Pero, ¿a las cuatro de la mañana?

Él soltó un suspiro incómodo, SunHee le besó la mejilla y entrelazo sus manos, —No me malinterpretes. Siempre voy a adorar oírte decir que me amas también, pero sé que algo anda mal. Hoy llegaste cansado, y no sos el tipo de novio que se pone un recordatorio para decir "te amo" cada seis horas, así que... ¿Qué ocurre?

—Ugh, odio que me conozcas tanto—, respondió cubriendo su rostro con su mano algo avergonzado y ella ríe levemente. Era increíble como podía entenderlo con una sola mirada, y siempre sabía exactamente qué decirle en cada situación, incluso a veces lograba ponerlo tímido. ¿Cómo era eso posible? Era buena escuchándolo, y la mejor dando consejos, siempre sería todo lo que necesitaría.

—Me llevó mucho tiempo, pero sí, conozco demasiado al gran Min Yoongi, ¿no crees? Conozco tu rostro cuando estas triste y cuando eres el más feliz del mundo. También reconozco qué queres decir cada vez que arrugas tu tierna naricita, y aprendí a comprender cuándo queres hablar o cuándo quieres ser escuchado, aunque normalmente digas que queres dormir. Por cierto, también sé que cuando te despertas de esta forma, y me miras así es porque tuviste una pesadilla, así que, ¿por qué no me cuentas de qué va eso?

Yoongi soltó una risa sintiendo como sus mejillas se tornaban rojas. Abrazó a su novia y dejó su cabeza en el pecho de la misma, escuchando sus latidos mientras SunHee acariciaba su cabello.

—Me dejabas—susurró. —Ni siquiera sé porqué y es estúpido, pero, simplemente te ibas, y no es algo que pueda soportar—, SunHee sabía que para Yoongi era algo difícil comentar ese tipo de cosas, y se sentía feliz de que se animara a hacerlo, ya que eso implicaba que se sentía seguro para hablar donde estaba, y en ese momento se encontraba entre sus brazos. 

—Oh, comprendo, pero, sabes que no tenes que preocuparte por eso, ¿no?

—Se sintió muy real.

—Lo sé, me ha pasado. Seguro no lo recuerdas, pero aquella vez cuando los acompañé en el tour, fui a tu cuarto en la madrugada. En aquel momento tenía miedo de ir, porque por un instante temí que no estuvieras allí, o que no quisieras verme, pero al verte durmiendo comprendí que todo fue una mala pasada, una absurda pesadilla mía.

—¿Por qué no me despertaste?—, Yoongi se apoyó sobre uno de sus brazos y miró a SunHee, ella le sonreía y acarició su rostro tiernamente, él dejó un beso en su frente y continuó escuchando.

—Porque recordé todo el amor que me tienes, y todo el que yo te tengo a ti, también sabía que en la mañana podría abrazarte, y de cierta forma eso me bastó.

El corazón de Yoongi estaba a nada de explotar. Toda su vida había esperado por un sentimiento como ese, y ahora lo había encontrado, porque ese instante le había confirmado que había encontrado al amor de su vida, y no se arrepentía de la elección que su corazón había hecho.

—Sos perfecta y te amo, lo sabes, ¿no?

—Me lo recuerdas siempre. Pero, ¿también sabes que me tenes completamente loca de amor y que jamás me iría de tu lado? Porque estoy muy enamorada, Min Yoongi.

Ambos sonrieron, y Yoongi se inclinó un poco para besar los labios de su novia con cariño. Luego consiguió recostarla sobre él para abrazarla y tenerla lo más cerca posible, logrando así quedarse dormidos después de varios besos y caricias.