**-Shots del Universo Marvel-**

ALIVIO (Logan)

Lo escuchaste quejarse y gritar en medio de la noche; probablemente eran nuevamente las pesadillas. Fuiste a su habitación a tranquilizarlo como algunas otras veces ya lo habías hecho, pero esta vez lo viste ahí acostado demasiado inquieto, incluso su almohada estaba mojada del sudor frío por culpa de las imágenes que de seguro tenía en su cabeza y que lo provocaban.

-Logan, despierta... solo estás soñando... Logan, Logan... -trataste de moverlo con suavidad, pero te diste cuenta de que tenía que ser más bruscamente –Logan, vamos, despierta...

De repente, al moverlo más fuerte, hiciste que sus ojos se abrieran pero el terror de una de sus pesadillas le obligó a gritar y sus garras eyectaron de sus nudillos encajándose en tu tórax. Borbotones de sangre emanaron sin parar.

Dándose cuenta de lo que había hecho gritó por ayuda. Tormenta fue la primera en llegar, seguida de Charles y Hank. Estabas desplomada en el piso bañada en un charco de sangre:

-¡Rápido, llévenla a la sala de cirugía! –dijo Xavier sin dudar

-Lo lamento Charles, no pude... los gritos... no fue con inten...

-Está bien Logan, no te preocupes. Ahora debemos actuar de prisa antes de que deje de respirar –le dijo Hank para tranquilizarlo

Pasaron las horas y por fin amaneció, y junto con la llegada del sol, la cirugía se desarrolló sin mayores complicaciones, él esperaba afuera cualquier noticia. En eso, sale de la sala el doctor Morgan, un amigo cirujano de Charles de varios años y a quien le tenía la confianza de pedirle ayuda cuando se requiriera algo más para sus alumnos. Agotado, se quitó el gorro de cirugía y caminó hacia donde estaba el profesor X, acompañado de Hank (lo había pedido de ayudante):

-Pues el procedimiento fue limpio, sin ningún contratiempo pero no deja de ser grave, hay que monitorearla por unos días más para ver su progreso

-¿Pero se pondrá bien doc? –preguntó Logan

-Todo es cuestión de los buenos cuidados y de que ella ponga de su parte para la recuperación. Voy a dejarles las indicaciones necesarias y los medicamentos que hay que suministrarle por si la ven que empeora. Ya sabes que pueden llamarme nuevamente si se requiere, Charles

-Gracias Roger. Te acompaño para desayunar –le invitó el profesor al cirujano para que tomara fuerzas después de un procedimiento tan largo

-Esta vez fue peor que la anterior, Hank

-Tranquilo Logan, va a estar bien –dijo Bestia

-No puedo estar tranquilo amigo; cada vez que tengo muchas pesadillas sucede algo malo. En aquella ocasión Rogue no se vio tan mal por sus poderes y porque alcanzó a tocarme para quitarme de mi poder de regeneración, pero ahora, T/N no tiene ese don y puede que muera... ¡y todo por mi culpa!

-Vamos Logan, necesitas descansar... ella es fuerte, ya la conoces

-¡No voy a moverme de su lado, y ni tú ni nadie lo va a impedir! –gruñó el mutante

-De acuerdo, como tú quieras... pero tampoco te dejes morir solo. Permite que alguien te releve mientras duermes un poco o comes o te duchas. Además nos hará bien a todos poder conocer su evolución –concluyó Hank

Logan pensaba en cada momento y repasaba en su mente lo que ocurrió esa noche, se atormentaba por haberte lastimado y en cada posibilidad de perderte el dolor lo invadía. Tenías poco de haber llegado a la mansión donde el profesor Charles te había invitado en un pensamiento después de localizarte por medio de Cerebro.

Tu poder era único: autorreplicación (podías clonarte en varias versiones de ti misma, en la cantidad que tú lo desearas); por lo tanto fue un poco difícil para él encontrarte en un tiempo considerable, lo estimaba un verdadero reto y al mismo tiempo, un logro para sí mismo. Cabe decir que ya no eras justamente una jovencita, pero aceptaste ser una "estudiante" en esa escuela, ya que tu formación académica había sido truncada por decisión de tus propios padres desde muy pequeña (alegando que podía ser peligroso para ti si alguien más conocía tu poder).

Así que cuando conociste a Logan, compaginaste a la perfección con sus gustos (a pesar de ser tu "maestro") y sus ideas. Se volvieron amigos casi íntimos y poco a poco te fuiste enamorando de él; y aunque todos en la mansión le sacaban la vuelta por su mal genio, cuando Logan se ponía de mal humor, tú solo le dabas por su lado o le ponías límites:

-¡Hey, no te pases Logan! Yo no tengo la culpa de que te agobien tus problemas. Déjame tranquila... o cuando te sientas con ganas de platicar sin estar escupiendo veneno, me avisas.

Eso hacía que el mutante se calmara casi de inmediato, dándose cuenta de que te lastimaba con su forma de ser. Alguna vez Kitty le dijo eras la única persona que podía domarlo, y que tal vez eso podría convertirse en más que amistad.

Obviamente, él lo negó, pero en la tranquilidad de su cuarto analizó las palabras de Kitty y reconoció que efectivamente, también se estaba enamorando de ti.

Pasaron 4 días mientras tú te encontrabas sedada para aminorar el dolor de las heridas, y aunque él pensara que tú no podías sentirlo, en la penumbra del silencio sentías su energía y eso te animaba a recuperarte. En la noche de ese cuarto día, por fin comenzaste a hacer movimientos con tus dedos... eran muy leves, pero perceptibles. En ese momento, era Tormenta quien te acompañaba; estaba sentada en el sillón, leyendo una novela romántica. Al darse cuenta de que estabas por despertar, fue a buscar a Logan:

-¡Logan! Rápido, ven...

-¡¿Qué sucede?!

-¡Está por abrir los ojos!

En un instante, ya se hallaba a tu lado, y vio con satisfacción que tus manos se movían y tus párpados se abrieron lentamente. Sonrió y acarició tu pelo:

-Hola hermosa

-Hola guapo –lo dijiste casi sin pensar, y te ruborizaste cuando descubriste que Tormenta y Charles también estaban ahí riendo por tu respuesta -¿cuánto tiempo estuve aquí?

-Llevas 4 días, pero te estás recuperando bien, pronto andarás corriendo por toda la mansión... más bien, todos tus yo andarán por toda la casa –dijo Logan

-No te preocupes T/N, vamos a cuidar bien de ti y espero que tú también le pongas las ganas para recuperarte rápido –dijo serio pero contento el profesor Xavier

-Claro que sí, profesor; aunque creo que en algo sí voy a cambiar...

-¿Y qué es eso, T/N? –dijo intrigada Tormenta

-Cuando Logan vuelva a tener pesadillas, en lugar de acercarme, voy a aventarle un bote con agua fría... sé que me gritará, pero voy a vivir con eso –todos rieron. Wolverine se acercó a tu rostro y tiernamente te besó en los labios mientras sus manos acariciaban tus mejillas

-No sé qué hubiera hecho si te pierdo para siempre, preciosa. Vamos a salir adelante juntos, para siempre

-Te quiero Logan

-Te amo... a ti y a todas tus versiones –y te besó en la frente