**-Shots del Universo Marvel-**

LA VECINA (Sam Wilson)

Eras vecina de uno de esos denominados "héroes", los Vengadores. A ti, sinceramente, te parecían hombres y mujeres que cometían actos fuera de la ley con total impunidad, y es por eso que los detestabas; pero no había nadie a quien detestaras más que a Sam Wilson, pues por lo poco que sabías, era uno de los de menor rango pero se creía demasiado importante para el equipo. Vivía justo enfrente de tu departamento.

Y él, al contrario de ti, cada mañana que salías a trabajar, te saludaba con un efusivo y respetuoso "buenos días" y una sonrisa amable. Era tan irritante tener un buen vecino al que odiabas por ser buena persona; eso te hacía sentir terrible con respecto a ti misma.
Pero no podías negar que el hecho de que ellos (los Vengadores) destruyeran tu oficina casi cada 15 días te hacía sentir molesta todo el tiempo.

-Esos patanes creen que por ser héroes pueden ir destruyendo todo sin que nadie haga algo y ni siquiera ellos lo pagan... tengo que buscar trabajos extras todo el tiempo para pagar el sueldo que dejan de darme cuando el edificio sufre otra vez algún derrumbe -les decías a tus amigas en cada oportunidad que tenías a forma de protesta

Extrañamente, habían pasado casi 3 semanas sin ningún tipo de incidente en la zona por donde trabajabas; eso te ponía de un excelente humor y ese día fuiste la más linda, amable, servicial y eficiente en la empresa. Pero al regresar a casa, notaste una pequeña horda de helicópteros persiguiendo algo o alguien en el cielo; delante de ellos, un hombre con alas surcaba en zig-zag.
Esperabas, con todo tu corazón, que no se dirigieran a tu distrito porque si no, ahora te quedarías sin dónde dormir.

De pronto, el hombre con alas se acercaba a gran velocidad hacia tu edificio y no dudaste en correr hacia tu departamento; voló casi a tu lado  y con su mano, te hizo un saludo y te sonrió, entonces lo identificaste: ¡era tu vecino Sam!

-¡Ah no, no te dejaré llegar hasta allá! -gritaste cuando estabas por abrir la puerta de tu edificio y correr al ascensor

Cuando estuviste dentro del elevador y éste empezó a subir, un golpe seco sacudió la estructura del inmueble y te quedaste atorada ahí dentro. Pulsaste cada botón pero nada sucedía, ni bajaba ni subía. Sacaste tu celular para obtener alguna llamada, pero por alguna extraña razón, no había señal ahí dentro y fue entonces que el pánico se apoderó de tu cuerpo.
Gritos y gritos pidiendo ayuda se ahogaban en el silencio y los minutos te parecían años.
Otro golpe por fuera del edificio te dio la sospecha que algo grave estaba sucediendo; una explosión por encima de tu cabeza te dejó helada, creíste firmemente en que morirías ahí encerrada o lapidada por la estructura.

Sin embargo, algo mágico pasó y la puerta del elevador  comenzó a abrirse, tu vecino Sam te gritaba buscándote para dejarte saber que estaba ahí para salvarte de esta muerte inminente.

-¡Hey, T/N, soy Sam! -la puerta ya abierta te dejó en claro que estabas entre 2 pisos y habría que escalar un poco por la conformación del ascensor -vamos, dame la mano, voy a sacarte de aquí

-¿Y si no logramos salir? ¡Voy a morir aquí adentro! -te sentiste impotente y bloqueada; estabas pegada a la esquina sin poderte mover y llorando

-¡Tienes que confiar en mí, acércate! -Sam solo estiraba la mano tratando de infundirte confianza -no morirás aquí, te lo prometo

-¿Cómo lo sabes? ¿Cómo puedes saber que nada malo pasará?

-Porque voy a sacarte de aquí... vamos

Venciste tu miedo y casi en un salto, tomaste la mano del Vengador y te aferraste a él. Pronto te tomó en sus brazos y con sus alas, salieron volando del edificio que en la parte superior estaba envuelto en llamas (más o menos en la dirección en donde estaba tu apartamento y el de él). De repente, algunos otros Vengadores llegaron a ayudarle a Sam a combatir a quienes lo perseguían. 
Él te dejó en un pequeño espacio con césped y cuando estaba por regresar a la batalla, 2 tipos con uniformes paramilitares y encapuchados se pusieron tras de él; gritaste para advertirle y con un movimiento los golpeó dejándolos tirados. Se alejó prometiéndote que volvería a checar que estuvieses bien.

Cuando pasó todo ese desastre y agarraron  a los tipos que perseguían a Wilson, éste regresó a la banca donde estabas sentada y esperando a que cumpliera su promesa; afortunadamente, Visión te acompañaba y no te sentías tan sola.

-Ya está aquí Sam, creo que sería mejor retirarme para que ustedes 2 hablen con más comodidad -dijo Visión

-Gracias por cuidarme todo este tiempo -dijiste 

-Bueno, creo que te encuentras bien después de todo -se acercó Sam y se sentó a tu lado en la banca

-No por completo: ahora no tengo casa y tú me salvaste -le dijiste con tono molesto

-Déjame ver si te entiendo: ¿estás molesta porque no tienes casa y porque te salvé la vida?

-Estoy molesta porque siempre he sabido que los Vengadores son idiotas que destruyen todo a su paso sin importar a quién o cómo dañan

-¿Eso no es un punto de vista un poco extremista? ¿Acaso que no valoras lo que hice por ti?

-Claro que lo valoro, pero si no hubieras destruido mi hogar...

-¡Hey! También mi departamento está destruido, ¿lo recuerdas?

-... ok, también tu hogar... No entiendo cómo es que nadie les dice nada cuando algo de esto sucede. Por eso no soy fan de ustedes, parecen anarquistas

-Wow, "de nada" -un suspiro de ligero hartazgo salió de la boca del moreno, pero trataba de contener su molestia -está bien, ¿qué te parece si te propongo algo?

-¿Algo como qué?

-Ambos nos quedaremos en el complejo de los Vengadores, ya que no tenemos dónde dormir... digo, no creo que Steve nos niegue un cuarto

-¿Un cuarto? -te sonrojaste al entender literalmente la proposición

-¡Bueno, no un cuarto para los dos! Cada quien en su propia habitación... ¿qué dices?

-Creo que no tengo más remedio que aceptar, tengo que dormir en algún lado

-Hola Falcon, ¿por fin pudiste hablar con tu vecina que tanto te gusta? -dijo Bucky mientras pasaba detrás de él haciéndole poner rojo como tomate

-¡Hey Bucky, lárgate hermano! -el soldado de invierno solo pudo reír mientras Sam te daba una sonrisa inocente por haber sido descubierto ante ti