Algunos shots e imaginas con los personajes de Marvel, tanto Vengadores, como X-Men; situaciones románticas, graciosas, tristes y cotidianas que les puede suceder a estos héroes
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No había manera en que pudieras escapar de enamorarte de Wanda, una chica sexy, linda, graciosa, valiente y muy amable; era todo lo que pudieras desear en una mujer. Después de mucho insistirle y de convivir por largo tiempo, le declaraste tu amor y la invitaste a salir. Claro, su hermano Pietro siempre se mostraba a la defensiva porque creía que no eras suficiente para ella; "no quiero que mi hermanita menor sufra, así que si me entero de que le estás haciendo daño, te juro que te mataré con mis propias manos". Con una amenaza así, obvio que te portarías bien.
-Bueno linda, ¿nos vamos? -le dijiste cuando bajó la escalera de su apartamento y se acercaba a ti -estás preciosa
-Muchas gracias -se sonrojó -estoy lista, vámonos
Para ser la primera cita, quisiste que fuera algo relajado, para que no hubiera presión sobre ella o sobre ti; así que fueron hacia una cafetería cercana de donde vivía ella con su hermano y pidieron un café frío para ti y un smoothie de mango y una rebanada de pastel de chocolate (el favorito de Wanda) para ella.
-¿Sabes? No quería decirte, pero tu hermano me ha puesto de nervios -le confesaste mientras ella tomaba de su bebida
-¿Y eso por qué?
-Pues... -ya no sabías si era buena idea decirle lo que había pasado -...en realidad, me ha amenazado de muerte
-¡¿Te ha qué?! -grita con sorpresa, haciendo que los comensales de la mesa contigua voltearan hacia la suya
-Me ha dicho que si hago algo incorrecto contigo o te hago sufrir, literalmente me va a matar con sus propias manos... y sí lo creo capaz -comentaste con la mayor seriedad en el rostro
Wanda de pronto se echó a reír por tu preocupación. A ti te pareció que se burlaba.
-¿Crees que es gracioso salir contigo bajo amenaza?
-Pietro no es capaz de matar ni una cucaracha. Cada vez que ve una en el baño, grita despavorido y me tiene que llamar a mí para que yo lo haga... es un cobardón de primera; así que no tienes nada de qué preocuparte -dijo la pelirroja serenamente dejando en evidencia al gemelo
-¿En serio? Vaya, eso no lo sabía... -suspiraste con alivio -entonces no tengo nada qué temer
-A quien de verdad deberías tenerle sumo respeto es a mí, si me llegas a herir, en verdad que no te la vas a acabar conmigo, te haré pagar todos los días de tu vida -tu rostro se puso amarillo y tragaste saliva con dificultad; ella solo se echó a reír una vez más viendo cómo sus palabras te afectaban -descuida, estoy segura que nunca lo harás -clavó sus ojos en los tuyos con la mayor de las dulzuras
