|Un amor tan hermoso| •HopeGa•

capitulo 45

— YoonGi, vas hacerle un hoyo al piso si sigues caminando en círculos.— le dijo SeokJin quien estaba sentando en el suelo viendo como el menor mordía su dedo pulgar con notoria frustración.

— Todos son tan idiotas.— soltó en un gruñido sin medir sus palabras, eso ocurría cuando se enojaba.

— Eres un niño apenas y te ven como tal, por eso prefieren mantenerte alejado.— intentó calmar JiMin con fracaso como había estado haciendo en esos minutos.

— No, como ellos me tratan es como un niño baboso como lo son los Omegas mimados de la alta sociedad ¡y ellos no me llegan ni al chicle de mis zapatos!

— De hecho seria al chicle de tus chanclas.

— No me ayudes JiMin.—  ladró el pálido, yendo hacia la puerta para golpearla, no los dejaron encerrados pero los Omegas le habían dicho que no saliera de la habitación.

_Ellos también me tratan como un niño mimado_

— Deberías sentarte YoonGi, son médicos, confía en ellos, por lo que dijeron ya han pasado por esas circunstancias.— SeokJin se levantó de su lugar cuando se sintió incómodo estando ahí.

— Confió en JiSung, pero no confió en el enfermerito ese de JeonGin. — abrió la puerta

— ¿A dónde vas?.— le preguntó SuHo antes de que saliera.

— Al baño, no pienso orinarme encima.— respondió para finalmente salir de la habitación.

— ¿Pero no hay un baño en la habitación?.— JiMin señaló la puerta en donde efectivamente existía un baño, Jin solamente negó con la cabeza recargándose en la puerta. Sabían que no iba al baño y que tampoco regresaría.

YoonGi se dirigía a dónde habían llevado a HoSeok, y por obra de los alienígenas, NamJoon no estaba ahí, ni nadie que vigilara el perímetro.

Punto para Min YoonGi.

El alfa dormía tranquilamente, demasiado para no hacer algo al respecto, Jeongin se inclinó sobre el rostro ageno acariciándolo, quería despertar al alfa y que lo hiciera de su propiedad ahí mismo. No podía dejar que Yoongi ganará, el llegó ahí y se ganó al alfa en tres días, Jeongin llevaba ahí tres años o más, no era justo.

Ya estaba en la parte inferior, no sabia si realmente esa habitación no funcionaba o qué cosa pero podía sentir perfectamente los tres aromas del Alfa, todavía seguía preguntándose de dónde provenía el tercer aroma.

Tomó el pomo de la puerta rezándole a Dios que no estuviera cerrada o algo así

Bingo, abierta.

Lo hizo con sutileza para no hacer algún ruido, pero su aroma se volvió algo ácido al percatarse de que solamente había un aroma además de él de HoSeok.

JeonGin.

Se tragó un gruñido, apretando sus puños al ver la cercanía del individuo sobre su Alfa.

_Alejate maldita futura lisiada_

— ¿Qué crees que haces enfermerito?.— se recargó en la pared cruzándose de brazos, no mostraría sus emociones por más que su aroma se volviese ácido en representación que alguien estaba tocando su territorio.

El omega sonriente paso la lengua sobre sus labios y sin quitar su gesto, giro sobre sus talones y le sonrió al omega como si fuera un niño que hace una travesura.

-Cuidando de mi hyung como debe ser ¿que haces tú aquí?

El pálido le devolvió la sonrisa mostrando sus encías rosadas.