Cuando YoonGi llegó al reclusorio, fue mejor de lo que esperaba, los pasillos de aquel lugar eran obscuros y olía a humedad. — Espero disfrutes tu estadía aquí, Min. Ya que aquí estarás hasta el último día de tu vida.
Rodó sus ojos con aburrimiento.
— Sí, ahorrate los malos comentarios, ¿cuál es mi celda?.— una puerta de metal fue abierta, era diferente a las otras celdas, ya que esta no tenia barrotes, era como un cuarto aislado. — Vaya, me dieron su mejor habitación.— habló sarcásticamente sintiendo como le quitaban las esposas, ya tenia marcas rojizas en sus muñecas, tardarían en sanar.
— Disfrutalo.— habló secamente el guardia empujando a YoonGi y cerrando la puerta una vez entró, al parecer no estaría solo, había un tipo más ahí adentro, podía deducir que era Alfa, estaba dándole la espalda observando hacia la pequeña ventana que tenia barrotes.
El pálido caminó lentamente hacia la cama que estaba más cercana a la puerta.
— Has causado mucho revuelto Min, sabia que eras problemático pero no creí que ha ese extremo. — el llamado giró su cabeza con extrañeza ¿cómo le conocía? Fue cuando el sujeto giró su cuerpo, su mente se iluminó.
— ¿JiYong?.— soltó con una pequeña risa. — ¡Vaya que alegría verte aquí! Bueno, no es una alegría, porque estas aquí, pero estoy aquí, así que sí es una alegr--- bueno ¿por qué estás aquí?
— Me atraparon en el acto, dos años de prisión, estoy terminando mi segundo mes.— alzó su pulgar, al parecer a él no le iba mal.
Los primeros días que el pálido estuvo ahí se pegó al Alfa compañero de su antiguo basurero, le había dicho muchas en ese tiempo; como que debía aprender a pelear en la cárcel si quería sobrevivir. Aunque por su condición no debía causar más problemas.
Un día de su primera semana ahí le dijo.
— DaeHyun te enseñó la pelea callejera, pero yo te enseñaré la pelea de la cárcel.
Y YoonGi aprendió en esa semana lo básico, podía defenser cuando algunos Alfas querían salirse con la suya; aunque claramente JiYong evitaba golpear al menor.
— Si llego a lastimarte estaré muerto y realmente prefiero mantenerte con vida.— comentó cuando el pálido le preguntó porque no podían pelear ellos dos cuerpo a cuerpo para fortalecer el entrenamiento.— Además enserio no quiero lastimarte.— señalando todo su cuerpo.
¿Por qué estaría muerto? ¿Qué había de malo en pelear?
¿A qué le temía que no podía ni abrazarlo?
— JiYong, no debes tenerme miedo.—
— No Yoon, no te tengo miedo, me sorprende que enserio no sepas la razón.
Esa semana realmente era confusa.
YoonGi tenia una visita, salió de su celda acompañado de dos guardias.
— Que alegría verte Min Bonito Suga, ¿qué tienes para decirnos hoy?.
— Que tu aliento apesta a inodoro de gasolinera, idiota.— pasó al lado de esa celda donde tenían la costumbre se moelstarlo, pero siempre terminaba al revés. Al llegar a la sala en donde estaba su visita se vio encerrado ahí mismo, no sin antes escuchar el grito de los guardias diciendo "Tienen diez minutos".
Quien estaba ahí dentro eran SuHo y DaeHyun, extrañandose por no ver a JiMin y SeokJin.
— Ellos están bien, pero se están preparando.— tomando asiento delante de ellos dos esperó a escuchar lo que tenían que decirle.— Escaparás hoy de la cárcel.
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|Un amor tan hermoso| •HopeGa•
FanfictionJung HoSeok es un reconocido Alfa, quien su única obligación es conseguir un Omega fértil para tener descendencia. Min YoonGi es un Omega, únicamente conocido y respetado en su colonia, la cual era el basurero de Seúl, y él... Él odia a los Alfas, m...