Overlord/Un Mundo diferente

Caballero de la muerte Parte2

Fluder Paradyne era un hechicero del mas alto nivel llegando a una sima que otros no podían siquiera imaginar.
A lo largo de sus 288 años de edad este recorrió un sendero largo aprendiendo sobre todo tipo de trucos.. ascendiendo de ser un simple aldeano al mago de la corte y ministro de magia.
El estaba muy al tanto de la heroica imagen que todos veían en el.
Desde el momento en que era niño y vio en su pueblo un lanzador de magia, su obsesión por descubrir los misterios de ella y como dominarlos, lo apasionaban mas que nada.
Mientras que otros veían El sexto nivel de fluder como un poder supremo este aun sentía que le faltaba mucho mas para aprender.
Pero sin un maestro era como dar pasos en la oscuridad, en ese sentido envidiaba a sus discípulos.
Los años seguían pasando para el, a pesar de su extensa vida alargada por magia este no poseia Inmortalidad.
Podía sentir como su cuerpo se deterioraba lentamente y su sueño por alcanzar el próximo estado de la magia se veía tan lejano...
De entre todas las criaturas que conoció y derroto a lo largo de sus años jamás vio una criatura tan poderosa... quizás descubriendo mas sobre ese No muerto legendario encontraría las respuestas que buscaba.
Deseaba creer desesperadamente en ello.
Pero antes de ello debía detenerlo.
Como hechicero sabia que los caballeros eran el Némesis de un lanzador de magia
El podia aventar cuantas bolas de fuego pudiese, pero era consciente de que si era golpeado por la bestia difícilmente sobreviviría.
No era debido a que no poseyera defensas mágicas sino que la diferencia de poderes era bastante desalentadora.
Y obviamente su fuerte no eran las batallas de cuerpo a cuerpo.
El campo de batalla se encontraba bastante despejado, todas las criaturas no muertas rodeando al caballero muerto se encontraban tiradas en el suelo como marionetas que le cortaron las cuerdas.
Algunos poseían quemaduras eléctricas otros tenían heridas de fuego.
También habían restos irreconocibles o partes desmembradas.
Las mas de mil criaturas que representaron una molestia anteriormente, fueron reducidas a polvo por solo una persona.
Miro a sus alrededores viendo que todos los que pudieron retroceder estaban siendo sanados por los sacerdotes en la retaguardia
"realmente increíble..." "era de esperarse Paradyne-sama" y toda clase de halagos sumidos en suspiros llegaron a sus sensibles oídos.
Estos coros venían de nada menos que los cuatro caballeros imperiales.
Aunque lo acompañaron para prestarle ayuda se sentían mas como espectadores.
Realmente molesto susurro el mago sacando un pequeño contenedor con un liquido azul dentro.
Era una poción que restablecerá su mana.

Mirando tranquilamente a la distancia se encontraba el No muerto que la humanidad jamás podría derrotar.

¡¡Death Knight!! Gritaron en coro Vendaval y Relámpago.
Se lanzaron al ataque, la distancia que debian recorrer era de unos 50 metros para enfrentarse a la criatura y probablemente serían atacados antes de poder llegar.
Anunciar su ataque a gritos tampoco parecía una buena idea y como era de esperarse el caballero de la muerte reacciono corriendo en dirección a quienes gritaron.
Fuera de tener miedo Nimble y baziwood tenían miradas seguras en el rostro, cuando la criatura estuvo lo suficientemente cerca ellos saltaron a los costados y para sorpresa del Caballero legendario una lanza paso a la ofensiva.
Leinas utilizo su lanza para atacar los puntos débiles de la bestia a una velocidad inhumana.
Relampago y vendaval fueron el cebo

Retrocedan dijo El inamovible a Baziwood y niamble.
La figura de un hombre con armadura pesada y un escudo por cada mano de al menos metro y medio.
Toda ella estaba compuesta del metal precioso Adamantita un lujo que solo los mejores del imperio Baharuth podían poseer.
La postura de este emanaba una solidez notoria dándole sentido a su apodo.
Leinas siguió atacando pero el caballero de la muerte solo había retrocedido un poco.
Al encerrar al Deth knight en las profundidades del ministerio de magia se le quitaron tanto su escudo como su espada curvada
Y se le aferraron mas extremidades con cadenas gruesas encantadas para ser mas resistentes
Al huir del ministerio la criatura deprendió (supuestamente) con pura fuerza bruta las cadenas del muro.
Arrastrándolas consigo a lo largo de su escape.
En sus manos los grilletes, las cadenas y parte del muro que las retenía seguían pegados demostrando la fuerza sobre natural que este No muerto poseia.
Al utilizar las cadenas su rango se ataques cambiaron a ser en vez de cuerpo a cuerpo por radio.