Capitulo 41

0 0 0
                                    

Spence la cogió de las manos y la acercó a su pecho. —Shelby y Torie me hablaron sobre lo tuyo con Justin.

Su alarma interna sonó. —¿Qué te dijeron exactamente?

—Que finalmente has entrado en razón y aceptado el hecho que Justin no es el hombre para ti. Estoy orgulloso de ti.

Ella perdió el paso mientras maldecía interiormente a ambas mujeres.

Él le apretó los dedos, un gesto que ella supuso debía ser reconfortante. —Sunny y yo no tenemos ningún secreto. Me dijo que te tiraste a los brazos de Justin en la fiesta de Shelby. Supongo que su rechazo te hizo darte cuenta de la verdad, y sólo quiero decir que estoy orgulloso que enfrentaras ese hecho. Te vas a sentir mucho mejor contigo misma ahora que has dejado de perseguirle. Shelby está segura de ello y Torie dijo... Bueno, no importa lo que dijo Torie.

—Oh, no. Dime. Estoy segura que será bueno para mi... crecimiento personal.

—Bueno... —Él le frotó la espalda. —Torie dijo que cuando una mujer se obsesiona con un hombre que no está interesado en ella, mata su alma.

—Muy filosófico.

—Estoy bastante sorprendido. Ella parece un poco tonta. También me dijo que estabas planeando tatuarte mi nombre en el tobillo, lo que no creí —. Él dudo. —No es verdad, ¿no?

Cuando ella negó con la cabeza, él parecía decepcionado. —Algunas personas de este pueblo son raras —, dijo él. —¿Lo has notado? No eran raras. Eran astutos como zorros y el doble de inteligentes. Movió sus rígidas rodillas. —Ahora que lo mencionas.

Torie arrastró a su marido a la pista de baila y maniobró para ponerse tan cerca de Spence y Meg como pudo, indudablemente esperando oír algo. Meg le dirigió una mirada asesina y se separó de Spence. —Discúlpame. Necesito ir al baño.

Apenas acababa de entrar en el baño cuando Torie, Emma y Shelby llegaron para confrontarla. Emma señaló el retrete más cercano. —Adelante. Te esperaremos.

—No te preocupes —. Meg se volvió hacia Shelby y Torie. —¿Por qué le dijisteis a Spence que ya no estaba enamorada de Justin?

—Porque nunca lo has estado —. Las pulseras brillantes de colores de la muñeca de Shelby sonaron mientras gesticulaba. —Al menos eso creo. Aunque tratándose de Justin...

—Y tú siendo una mujer... —Torie cruzó sus brazos. —Aunque es obvio que inventaste todo eso para evitar a Spence y todos lo habríamos dejado pasar si Sunny no hubiera aparecido.

La puerta del baño se abrió, y Birdie entró, seguida de Kayla y Zoey.

Meg alzó las manos. —Genial. Voy a conseguir que me violen.

—No deberías hacer bromas sobre un asunto tan importante como este —, dijo Zoey. Llevaba unos pantalones piratas blancos, una camiseta azul marino en la que se leía el cuadro de honor de las escuelas públicas de Wynettte y unos pendientes que parecían haber sido hechos con pajitas de beber.

—Así son la gente de Hollywood —, dijo Birdie. —No tienen las mismas reglas morales que nosotros —. Y luego le dijo a Shelby, —¿le dijiste que tenía que alejarse de Justin ahora que Sunny se está enamorando de él?

—Estamos en ello —, dijo Shelby.

Emma tomó el mando. Era de señalar la autoridad que podía poseer una mujer relativamente pequeña con mejillas de muñeca de porcelana y rizos de dorados. —Debes pensar que nadie comprende tu situación. Una vez yo también fui una forastera en Wynette, así que yo...

Llamame IrresitibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora