𝐶𝑜𝑛𝑓𝑒𝑠𝑠𝑖𝑜𝑛𝑠 𝑂𝑓 𝑀𝑦 𝐵𝑟𝑜𝑘𝑒𝑛 𝐻𝑒𝑎𝑟𝑡 | 𝙇. 𝙃𝙚𝙢𝙢𝙞𝙣𝙜𝙨

Cinderella better get your ass home

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❝ 𝑊𝘩𝑒𝑛 𝐼'𝑚 𝑖𝑛𝑠𝑖𝑑𝑒 𝑦𝑜𝑢𝑟 𝑝𝑢𝑠𝑠𝑦, 𝑑𝑎𝑚𝑛 𝑖𝑡 𝑓𝑒𝑒𝑙𝑠 𝑠𝑜 𝑟𝑖𝑔𝘩𝑡❞

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Dormir en ese pequeño sillón casi todas las noches me tenía la espalda pulverizada, pero no le quería decir nada a Luke porque se iba a preocupar y no me dejaría quedarme más con él.

Ahora era yo la que lo protegía de la maldad del mundo exterior, no quería que se alterara o se afligiera por nada pero cada vez se me hacía más difícil fingir que todo estaba bien.

Estaba con la cabeza recostada de la cama mientras le rascaba el brazo paseando mis uñas por el para que se quedara dormido. Desde que volví a su habitación no habíamos hablando, él estaba callado y yo no quise molestarlo.

El silencio junto a él no era incomodo pero se notaba pensativo y serio y más que incomoda me sentí preocupada.

—¿Puedes llamar a Ashton?.—habló luego de un rato y levanté la cara para verlo.

—Son como las doce de la noche amor.

—Llámalo, por favor...—asentí tomando mi teléfono de la mesita y marqué el número poniendo el alta voz. Esta vez me enviaba directo al buzón y me preocupé pero no lo demostré.

—Debe estar dormido.—dejé el teléfono en donde estaba y me levanté para acurrucarme a su lado. Le di besos en la mejilla y bajé por su cuello quedándome ahí.

—Ya quiero salir de aquí, te lo juro que no aguanto un día más.—suspiró abrazándome hacia él.—¿Qué te ha dicho la doctora?

—Que en un par de días te puedes ir.—acaricié su pecho con mis uñas.—¿Te conté que te habían declarado muerto?.—me alejé de su cuello para verlo.

—No...—negó y nuestras narices se tocaron.

—Las horas pasaban y no sabía nada de ti. Mi madre se quedó conmigo en la sala de emergencias, no me daban información porque no era tu familiar y fue cuando llegó tu mamá que supimos de ti.—subí mi mano hasta su mejilla acariciándosela.—Me dejaron verte y me puse muy mal cuando te vi lleno de tubos y cables...la doctora entró en ese momento y me dijo que ella no creía en los milagros hasta ese día.—puse mi mano en su corazón.—Llegaste aquí sin vida...te declararon muerto y de repente tu corazón volvió a latir.

Recordar todo eso me puso muy sentimental...saber lo cerca que estuve de perderlo me devastaba.

—Estaba por irme y luego recordé que si me moría otro se iba a quedar con tu vagina bendita y me devolví a medio camino.—reí sin poder evitarlo y volví a mirarlo a los ojos.—No era mi momento...ya yo pensé en como quiero morirme.

—¿Quién piensa eso Luke?.—negué entre risas.

—Por una sobredosis de viagra, yo así todo viejo y tú montándome y derepente me da un paro cardíaco y muero con una sonrisa.

—Ah claro y yo traumada para siempre.

—Espera que no he terminado.—negó acariciándome el cabello.—Volveré en forma de fantasma, como en la película Ghost y seguiremos teniendo sexo como ese capitulo super bizarro de Grey's Anatomy.

—Tienes problemas muy serios bebé, de verdad que sí.—se echó a reír y me atacó con besos.

—Tengamos sexo ahora.—comenzó a darme besos en el cuello y lo alejé.