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El jóven Lennon recordaba su visita al hospital, aquella en la que tuvo acompañar a Paul.
Ese día había sido un completo circo, pues a pesar de que el azabache iniciará con un buen comportamiento, al ver que sería pinchado con agujas se sobresaltó demasiado, y John, por su propia cuenta, tuvo que ingeniárselas para lograr calmar a Paul. El trato fue que todos los procedimientos que los doctores hicieran con el pelinegro también tendrían que hacerlos con el castaño; Así Paul se sentiría acompañado todo el tiempo.

Al inicio parecía una buena idea, pero cuando los médicos intentaron extraer su sangre, John tuvo que controlarse y aparentar que el hecho de tener una aguja dentro suyo no le molestaba en lo absoluto; todo para que el azabache no se negara a que le hicieran lo mismo.

Dentro del hospital, aparte de estudios clínicos, el pelinegro también fue estudiado por psicólogos, Quienes llegaron a una conclusión: "Paul puede comenzar a socializar, solo que debe hacerlo paulatinamente para así evitar inconvenientes".
John agradeció que no se mencionara nada sobre la salida al striptease. De otro modo estaría metido en demasiados problemas, de los cuáles en ninguna circunstancia podría salvarse.

—¡JOHN!— Gritó una voz, logrando sacarlo de sus pensamientos.

Se trataba de George.

—¿Qué quieres?— Dijo de mal modo.

—Te estamos hablando— Contestó —Pero parece que estas mal viajado.

Stuart, George, John y Thomas yacían en una mesa de desayunos perteneciente a la escuela, misma donde había toda clase de comida que entre ellos compartían.

—Lo siento, no me interesa su conversación— Le dijo el castaño al de cejas gruesas, quien en respuesta le saco la lengua en tono burlón.

—¿Te preguntábamos si vas a salir el sábado con nosotros?— Musitó Stuart.

Mhmm No lo sé. Tengo muchas cosas que hacer...— Les mintió.

Era extraño. Casi siempre tenía ganas de andar con sus amigos, sin embargo, esta salida no le llamaba la atención.

—Hasta Tom va a venir con nosotros—Declaró el de pecas —Tienes que venir. No es lo mismo sin ti.

—¡No me dejes solo con mamá gallina y su polluelo!— Pidió George, mientras miraba con desprecio a Stuart y Thomas—Moriré de aburrimiento.

—Ya encontraras la forma de sonsacarlos, siempre lo haces.

—Anda. Hablaremos con tu padre si es necesario— Negoció el de pecas.

—No tiene caso, además yo..

Un fuerte grito de dolor —Junto con un golpe sobre la mesa— interrumpió a John, y no solo él, sino que el trío de amigos observó como Thomas salía corriendo a toda velocidad.

—¿Qué carajo?— Espetó Harrison totalmente desubicado.

—Hay que seguirlo— Dijo Stuart mientras se levantaba de la mesa.

Lennon y Harrison se echaron una mirada que denotaba confusión, solo para luego salir corriendo detrás del chico de pecas; todo esto bajo los murmullos y la mirada atenta de todos los muchachos que yacían en el patio escolar.

A lo poco encontraron a Stuart al final de un amplio pasillo, tocando una puerta con desesperación.

—¡Tommy, ábreme!— Chilló —¡¿Te sientes bien?!

—E-Estoy bien— Tartamudeó —¡Vete de aquí!

—¿Qué sucedió?—Preguntó el castaño, a la par que se acercaba al bajito.

𝔽𝕠𝕣 𝕍𝕒𝕝í   ●●McLennon●●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora