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El sonido de los cubiertos chocando sobre la cerámica prevalecía en el lugar. Absolutamente nadie hablaba, tan solo Millie, madre de Stuart, era la única interesada en crear una conversación; después de todo, esta cena tenía la finalidad de conocer al novio de su hijo y de algún modo, dar el visto bueno a la relación.

Si Millie había reconocido algo era que, aparentemente, Stuart tenía gustos muy parecidos a los de ella. Hombres serios con el resto y sumamente torpes con sus parejas.

—¿Te esta gustando la comida, Aren?— Preguntó ella.

Cohibido, el rubio pasó la comida que había estado masticando.

—Cocina delicioso, señora Sutcliffe.

Oh No seas indulgente, muchacho.

—En serio.— Respondió Aren. —Me sorprende que Stuart sea delegado.

Complacida, Millie sonrió pasa sí misma y claro esta, esto había sumado un punto al visto bueno que tendría el rubio.

—Vete de aquí, Tony.— Masculló Pauline de un momento a otro, pues un peludo gato naranja se escurría entre sus piernas. —Bola de pelos gorda.

—Deja en paz a mi gato.— Respondió el de pecas. —Él no hace nada a nadie.

—Solamente es un glotón.— Murmuró su hermana.

—No discutan.— Dijo Charles. —Es de mala educación.

Millie limpió rastros de comida con ayuda de una servilleta, debido a la intención de conversar con su invitado. Finalmente, inhaló calmada.

—¿Ustedes de dónde se conocen?— Preguntó la mujer. —Stuart apenas habla al respecto.

—Aren es hermano de Thomas.— Respondió Stuart.

—¡Eso es fantástico!— Exclamó maravillada. —Quiere decir que eres cuñado de tu mejor amigo. Hablando de ello ¿Cómo está Thomas? Hace mucho no escucho de él.

Stuart perdió un poco de aire al escuchar tal pregunta. Pocas cosas lastiman tanto como la indiferencia de un amigo, aunado a esto, el no poder entender el motivo de su comportamiento desconcertaba al de pecas, que constantemente se angustiaba buscando explicaciones o intentando contactar al bicolor.

—Tommy ha estado bastante ocupado estudiando para la universidad.— Contestó Aren, salvando a Stuart de brindar una incómoda respuesta. —Aplicará en Cambridge.

—¿¡De verdad!?— Dijo Millie, notablemente emocionada. —Díganle de mi parte que le deseo lo mejor.

—Está bien, mamá.— Murmuró Stuart. —Cuando lo vea le comento.

Cuando un silencio se formó Joyce aprovechó para realizar un comentario repleto de saña y fiel a su mordaz personalidad.

—A Pauline le gusta Thomas.

—¡Cállate, estúpida!— Chilló la hermana menor. —Tonta mentirosa.

—Sí es verdad.— Se rió ella. — Me lo dijiste el otro día.

—¡Voy a contar tus secretos si continuas siendo una perr..— Pauline frenó su lengua antes de terminar.

—No te atreverías.— Declaró Joyce con suma seguridad.

—¿Apostamos?

—¡Compórtense como se debe!— Exigió su padre con un tono sumamente serio, lo que obligó a las dos a callarse.  —Estamos cenando, no es momento de escenas.

—Tan solo trato de decir que falto yo.— Expusó maliciosa. —¿No tendrás otro hermano por ahí, Aren?

—Si continuas con esos comentarios te pediré que te retires de la mesa, señorita.— Regañó su madre. —Pones incómodos a todos.

𝔽𝕠𝕣 𝕍𝕒𝕝í   ●●McLennon●●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora