Capítulo 57

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Gabriel.

Estaba ansioso y emocionado, ya nada más le quedaba un mes de embarazo a su ángel para que naciera su bebé y saber finalmente si iba a ser niño o niña, pero de algo estaba seguro, sería una linda o lindo bebé. Ya que ninguno quiso saber el sexo del pequeño. Últimamente Gabriel no había sentido las patadas habituales de su bebé en el vientre de su madre y eso lo preocupo, pero, Cassandra y Christopher le explicaron que era porque faltaba poco para que naciera, al saber eso se sintió aliviado y todavía más ansioso, ¡Ya quería tener a su bebé en sus brazos!

Pero su emoción duraba cortos períodos de tiempo ¿Quién le dijo que lo peor no había Sido estar secuestrado semanas por una loca? No señores, Gabriel supo que lo peor apenas iniciaba en su vida como UN HOMBRE CASADO OFICIALMENTE. ¿Que era lo peor entonces? Fácil...

Sobrevivir a los cambios de humor y antojos extraños de tu esposa.

Gabriel en ese momento supo que lo que había sucedido con Janeth Bellamy quizás no era tan grave, como la situación de tener que cuidar meticulosamente cada palabra que salía de su boca. Sino deseaba que su embarazada y muy sentimental esposa lo castrara.

Todo aquella noche estaba en penumbra y se extendía un silencio inquietante, No se escuchaba nada. NADA. Ni una gotera, ni autos pasando por la calle, ni el sonido que hacía la nevera al funcionar, o el aire acondicionado, o el microondas. O algo, CUALQUIER COSA.

Malditos electrodomésticos de última generación.

Ni siquiera alguien caminando por la casa, algún signo de vida, Nada.

Pues claro, son las 4:30 de la mañana. ¿Qué esperabas tonta?. le dijo la voz de su subconsciente en su cabeza.

Cualquiera pensaría que el silencio la haría dormir plácidamente. Pero la verdad era que extrañaba los ruidos de la calle, o del ventilador. El murmullo de la ciudad era como una canción de cuna para ella.

Suspiró, removiéndose por milésima vez en la cama. Aún no sabía porque Gabriel no se había despertado con tanto movimiento, Y eso la enojaba. ¿¡Porque demonios no se despertaba!?

Se había levantado una hora atrás, y desde entonces no podía dormir. Corrección. No QUERIA dormir, ¿La razón? Tenía un antojo. ¿De qué? Pues veamos la lista.

-Una hamburguesa doble carne con queso.

-Malteada de caramelo y maní.

-Pepinillos con mantequilla de maní… y jalea.

Mmmm. De solo imaginar todo eso se le aguaba la boca. Podía sentir sus papilas gustativas palpitando.

Pero no se atrevía a despertar a su esposo, pues últimamente tanto él como Jackson habían tenido trabajo hasta el cuello. La Eneriz no quería admitirlo pero a veces sentía que Gabriel era un poquitín bipolar. Solo un poquito. Y sumándole a que era sábado por la madrugada y él había llegado a media noche por una complicación en el trabajo, no le pareció que si lo despertaba él estuviera de muy buen humor.

Por lo que recurrió al plan B.

Estar inquieta toda la noche hasta que él se despertará accidentalmente. Le preguntará que sucede y ella muy inocentemente le contará sus penurias. Y LISTO, tendría el alimento que tanto le pedía su bebé. Pero no contaba con algo. Y era que Gabriel dormía como un tronco. Su esposo tenía un sueño muy pesado, estaba segura que ni un terremoto lo despertaría.

Mi forma de amarte [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora