Los Caídos #3 - Ángeles caídos

2. Muchas cosas te esperan

Cristal

Después de que Alejandro se llevó a a la chica a la enfermería, nos juntamos todos en su oficina para hablar de lo que había pasado porque todo fue muy extraño y no creo que haya sido una coincidencia que la luz volviera justo cuando el demonio desapareció.

— ¿Qué pasó entonces? — preguntó Alejandro. 

— El hombre o mejor dicho su silueta estaba ahorcando a Alicia — dijo Eric. 

— ¿Una silueta? ¿Como un demonio? — preguntó, mirándome a mi como si fuera la experta en esas horribles cosas.

— No — dijimos Makarius y yo al mismo tiempo.

— Quiero decir, sí, probablemente era un demonio. Sin embargo, jamás había visto uno igual a ese — expliqué.

— Exactamente eso — dijo Makarius apoyando mi explicación.

— ¿Lo mataste? — preguntó Alejandro mirándome expectante y yo reí.

— ¡Papá! — exclamaron los mellizos.

— ¿Qué? — preguntó él.

— ¿Por qué tiene que ser necesariamente Cristal? — dijo Eric indignado.

—Sí, pudimos ser nosotros — Kenneth apoyó a su hermano y yo reí aun más.

— Van a disculparme, pero Cristal es la que más experiencia tiene. Sé que ustedes son fuertes y valientes, pero los conozco perfectamente bien.

Los mellizos se miraron cómplices y suspiraron.

Claro que los conocía bien porque no se habían movido un centímetro en el pasillo. Incluso Makarius, que es mitad demonio y está acostumbrado a todo este tipo de cosas, no había movido un solo dedo para ayudar a aquella chica.

— Cuando vuelva a casa, preguntaré que ha pasado esta noche y les informaré — dije.

— Gracias, señorita Night — dijo Alejandro.

—¿Alicia va a estar bien? — pregunté preocupada —. Ella es una banshee, ¿verdad?

— Exacto y las cuidan más que a cualquiera de nosotros aquí — Kenneth rodó los ojos.

— Sabes que están casi en peligro de extinción, Kenneth — Eric lo miró mal.

— Lo que quiero decir es que el cuidado debiese ser para todos iguales — dijo el rubio.

— ¿Van a contarles a los demás estudiantes? — preguntó Makarius.

— Por protocolo, debo hacerlo — dijo Alejandro— y luego tengo que informar a todos los padres de los estudiantes.

— Convocaré a una reunión extraordinaria ahora mismo — dijo acercándose hasta el micrófono que estaba sobre su escritorio.

Mientras él llamaba a todos los estudiantes a reunión, su voz se escuchaba por los parlantes que estaban al rededor de la escuela. Me acerqué hasta Kenneth para preguntarle si podía ver a la banshee.

— ¿Puedo verla? ¿Hacerle unas preguntas?

— No sé si sea lo mejor que la interrogues. Debes esta traumada — dijo el rubio haciendo una mueca.

— Por favor, Kenneth — supliqué.

— Está bien — resopló y se acercó hasta mi oreja para que nadie más escuchase —, pero iremos cuando todos estén en la reunión.