Los Merodeadores - Reescribiendo el Futuro

Recuerdos

Sirius veía aquella caja en sus manos y sentía ansiedad. Lo peor, es que el hechizo que Lyra había usado para ver las memorias fuera de un pensadero no le estaba saliendo bien y temía que en un mal movimiento, las pudiera destruir.

Aquel sueño que había tenido Lyra, le recordó que había tenido uno igual y le preocupó. James le contó acerca de la manera que Lyra tenía de usar la adivinación y solo sintió que una presión le invadía.

Necesitaba ver esas memorias, no podria dormir ni estar tranquilo. No podía ir al Ministerio en esos momentos, la amenaza de Umbridge aún retumbaba en su cabeza.

Solo había un lugar con un pensadero disponible.

Se lo debían. Era lo menos que podían permitirle.

Aparecerse en el número 12 de Grimmauld Place le causaba una serie de recuerdos nada placenteros, sin embargo había tenido sus momentos. No es como si Walburga toda su vida hubiese sido una mala madre, pues de ella había aprendido a no dejarse joder por la tonta de Bellatrix.

Cuando tocó la puerta escuchó los gritos del elfo despotricando contra él y los pasos de Walburga y Orion retumbaron en la escalera.

- ¿Que haces aquí indeseable traidor? - soltó Walburga mientras se acercaba.

- ¡Vaya! ¿No se puede visitar de vez en cuando? - tentó con una sonrisa fingida - Bueno, se que no soy bienvenido pero...no es como si me encantara estar aquí.

- Entonces explícate Sirius, ¿que haces aquí? - preguntó Orion con sobriedad - Pasa y cierra la puerta.

- ¿Ves Walburga? Al menos Orion es mas diplomático - soltó haciendo que la mujer se enfureciera mas - Escuchen, necesito el pensadero.

Aquello que dijo mientras cerraba la puerta, hizo que la mujer frente a él, ataviada en su elegante bata de dormir, soltara una risa.

- ¡Fuiste expulsado de esta casa Sirius! No tienes derecho a nada dentro de ella - terció Walburga.

- Tecnicamente yo me auto-expulsé. El hecho es que necesito ver algo...

- ¿Vienes el día de tu cumpleaños a ver algo?

La pregunta de Orion sorprendió a Sirius que le miró casi boquiabierto, el mayor de los Black pareció avergonzado de aquel momento de debilidad.

- Si quieres usar el pensadero, hazlo. Pero no lo tomes de costumbre. Solo entras aquí por Lyra - continuó Orion.

- ¿Puedo preguntar algo?

- No - siseó Walburga molesta - ve al maldito pensadero y termina de una vez.

- Es algo que respecta a Lyra. Ella...ha tenido este sueño extraño con tres cuervos y es realmente buena en adivinación, ¿existió algún clarividente en la familia Black?

Orion y Walburga se miraron y aquello inquietó a Sirius.

- ¿Un sueño con tres cuervos? - preguntó Orion acercandose a Sirius.

- Si, yo hace años tuve ese sueño repetidas veces. Pero ella lo ha tenido ahora...y me lo ha recordado - suspiró - quizás es una estupidez. Iré al pensadero, luego me largaré.

- Cuando eras pequeño solías tener ese sueño .

La voz de Walburga le detuvo. Sirius se giró para mirarle y ella a diferencia del rostro de desagrado que tenía al verle, le miró con preocupación.

- A veces me contabas que tenías estos sueños con tres pajaros negros, cuervos, que se posaban frente a ti. La noche antes de tu nacimiento yo también tuve ese sueño, pero solo esa vez - contó sin dejar de mirarle - ¿Ella los ha tenido también?