- ¿Todo bien en esa cabecita princesita Black?
Lyra volteó hacia Fred y le sonrió mientras asentía. Caminar con el hacia Hogsmeade era muy relajante, en realidad estar cerca de él, le hacía sentir tranquila. Aunque sabía que Fred mantenía sentimientos mas profundos por ella, él parecía respetar su decisión de mantenerlo únicamente como una simple relación donde ambos pasaban un buen rato besandose en cualquier espacio que encontraran vacío. Sentía que sus sentimientos por Alexander no habían desaparecido y que era una tonta por dejar que aquello empañara lo que podía ser un hermoso pero corto romance con Fred Weasley.
- ¿Se ha molestado?
- ¿Quién? - ella miró al pelirrojo algo confundida.
- Harry - Fred se dio cuenta que ella parecía algo perdida aún - vi que te dijo que fuera con ellos y no parecía muy feliz de que vinieras conmigo.
- Oh, bueno. Creo que en realidad teme mas por tu vida si me dejas decirlo. Le preocupa que papá se entere que tu y yo tenemos algo y te asesine - le respondió con tranquilidad.
- A mi me ha parecido un pequeño ataque de celos - tentó con el ceño fruncido pero esta vez Lyra soltó una risita.
- ¿Harry? ¡Como crees! Lo que le pasa es que es un niño mimado. Quiere la atención de todos sus amigos. Además, siempre es algo temperamental - ella le miró y le dio un beso en la mejilla - parece que el celoso eres tu.
- No, yo no - Lyra le miró divertida y con una ceja alzada sugerentemente - Bueno, puede ser. Pero es que tu no te das cuenta de lo bella que eres y eso me preocupa.
La risa de la pelinegra le pareció divertida y terminó por unirse a ella. Ya estaban cerca del pueblo y ella le tomó del brazo acercandolo.
- ¿Por qué debería darme cuenta de mi aspecto? Se que alardeo a veces, pero solo lo hago para bromear. Me considero excepcionalmente normal - dijo ella con simpleza - Aunque, ya me han dicho eso antes. ¿Te gusto por mi físico o porque realmente te agrado? - le preguntó con total seriedad.
- Ambas - respondió Fred con sinceridad - pero realmente lo que mas me gusta de ti es que no tienes miedo de hacer lo que deseas. Eres divertida y brillante - dijo revolviendole el cabello - pero por Merlín, ¡tengo ojos princesita! Eres hermosa, sobretodo cuando sonríes. No es como si pudiera negarte algo cuando lo haces - soltó mientras le miraba con apremio - ¿Puedo preguntarte algo?
- Claro.
- ¿Por qué quieres volver a norteamérica? Digo, me parece que quieres a Sirius y te has adaptado aquí. Creo que serías feliz si te quedaras.
- Probablemente. Adoro a Sirius, Fred. Nunca tuve un padre y realmente aunque Sir esté algo loquito y sea un desastre tratando de ser el adulto entre los dos, le quiero y me siento feliz de ser su hija, pero, crecí en otro país que no es este y aunque me agraden las personas que he conocido, no se si quedarme me haga feliz. Además, le he complicado un poco la vida a Sirius. A veces tengo la impresión de que estaba recuperandose de todo y vine a arruinarselo, aunque el no lo diga, se que quizás es así.
- Sirius es un buen tipo, se ve que te quiere. Mamá dice que ha estado solo mucho tiempo y que aunque James sea como su hermano, no es lo mismo contar con tu propia familia - Fred le atrajo mas y ella se sintió reconfortada, el frío parecía mas potente de lo que había imaginado - ¿Que es ese anillo que siempre llevas? ¿Te han comprometido y no lo sé?
- ¡Eres un idiota Freddie! -ella dio un codazo leve en el estómago - No creo que quiera comprometerme tan joven. Es un anillo familiar, de parte de mi padrino - mintió rapidamente - en ausencia de Sirius, mi padrino Gideon ha sido como un padre y me ha acogido en su familia desde que soy un bebé.
ESTÁS LEYENDO
Los Merodeadores - Reescribiendo el Futuro
FanficLos Merodeadores han sobrevivido y esta vez la historia no será la misma. Harry Potter el niño que vivió sigue siendo una leyenda viviente al igual que sus padres, ahora, estos deberán enfrentar juntos el peligroso camino que los lleva a Lord Voldem...