Aquella casa había estado en un silencio profundo por mucho tiempo, sobretodo porque ya no había motivo por el cual rabiar o siquiera sentir alguna otra emoción. La antiquísima casa Black solo existía en la memoria de muy pocos, aquellos de corta data que preferían hacer la vista gorda a un apellido ahora mancillado por la traición y sobretodo por rastros de oscuridad.
Kreacher mantenía la casa pulcra, aunque seguramente nadie iría de visita, desde hace mas de 14 años nadie lo hace.
Sin embargo, Walburga Black no había perdido la costumbre de pasar revista, cada noche antes de dormir. Todo ordenado, limpio, impecable.
Todas las noches tenía el mismo ritual, bajar las escaleras, tomar te en la pequeña sala y luego entrar en aquella habitación a ver solo una cosa.
El arbol familiar de los Black era peculiar, automáticamente los integrantes de sangre limpia aparecían en aquel tapiz, incluyendo sus esposos o esposas si tenían el mismo estatus. Pero Walburga solo entraba por una razón, un nombre en aquel tapiz que rompió una parte de su ser al ver que su color en la pared, se había tornado gris sentenciando así su muerte.
Tocó el nombre de Regulus y suspiró, pero hubo algo que desvió su vista, haciendo que parpadeara unas cuantas veces.
El nombre y el rostro del tapiz que marcaba a Sirius Black, se había restaurado, como si jamás hubiese sido vejado de allí, además una hermosa línea se dibujaba debajo de su nombre, llegando hasta un rostro delicado y hermoso que remarcaban unas sonrojadas mejillas y unos ojos de un gris plomo dibujado, con un nombre que casi termina por infartarle.
- Lyra Black

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Los Merodeadores - Reescribiendo el Futuro
FanfictionLos Merodeadores han sobrevivido y esta vez la historia no será la misma. Harry Potter el niño que vivió sigue siendo una leyenda viviente al igual que sus padres, ahora, estos deberán enfrentar juntos el peligroso camino que los lleva a Lord Voldem...