Narrador Omnisciente.
Poché llegó al bar a la misma hora de siempre, dos horas antes de que este fuera abierto. Hoy sería noche de música latina y barra libre hasta las once de la noche, así que necesitaban verificar las botellas que tenían y los ticketes que entregarían los meseros a las personas que entraran.
-Hoy vienen mis amigas.- Poché dijo a Nat quien la miró curiosa. -Y un amigo.- agregue haciéndola sonreír.
-¿Quién es?
-Se llama Zac, mujeriego y anticompromisos.
-La mejor descripción para un hombre.- dijo anotando algo en las hojas del inventario. -¿Vamos a dar nuestro show?- preguntó con una sonrisa coqueta.
-Sí queremos aumentar las propinas y comisiones...- susurró María José acercándose a ella. -Deberíamos hacerlo.- Sonrió dejando un beso en la mejilla de su compañera.
-Algún día caerás, Garzón. Algún día.- gritó cuando se alejó hasta donde el chico de almacén.
Las dos horas pasaron rápido, luego ya estaba el bar llenándose de jóvenes universitarios. La música estaba al tope y los chicos ya pedían sus bebidas.
Las risas entre las compañera de barra estaban presentes, los chicos coqueteaban con María José y las chicas con Natasha.
-Bueno, tal vez te tenga de amuleto junto a mí.- Nat mencionó cuando pasó detrás de su compañera.
-Lo mismo digo.- respondió Poché por encima de la música.
-No puedo creer que sea el único chico en este grupo.- Zac dijo cuando estaban montados en el auto de su mejor amiga.
-Bueno, alguien se adjudicó la invitación, ¿qué podemos hacer?- Laura respondió con una risa. -Además, Michael estará allá con un par de amigos.- agregó cuando miró su móvil.
-Bien, chicas.- Kim rió cuando una respuesta llegó a su móvil. -Esta noche está para divertirnos y... Conocerán a mi novio.
Los gritos de alegría de todos en el auto se hicieron oír en forma de celebración. Veinte minutos después, estaban estacionando el auto.
Bajaron mirando a su alrededor, chicos se besaban sobre los autos y algunos cerca de la oscuridad.
Kim llevaba una falda corta de lentejuelas plateadas y una blusa blanca de tirantes con un cuello caído; Laura, por otro lado, vestía unos shorts negros imitación cuero y una blusa blanca sin mangas. Luego estaban Lucía y Sofía, quienes vestían casi igual un top negro y encima una camisa de red del mismo color; en la parte de abajo, Lucía llevaba unos pantalones negros y Sofía una falda del mismo color; ambos imitación cuero.
Y al final estaban Daniela y Zac, Daniela llevaba una camisa manga sacada con el logotipo de Ramones y estaba fajada en una falda corta del color negro como la camisa; Zac por otro lado, llevaba una camisa blanca básica y unos jeans negros.
La fila para entrar estaba larga, pero con Sofía se adentraron entre la multitud hasta la puerta.
-Parker.- saludó al hombre que cuidaba la puerta. -Somos seis personas.- Parker quitó la cadena para dejarlos pasar.
El descansador que había dentro estaba lleno de chicos y chicas que se sacaban fotos, y también de meseros, quienes ofrecían el primer trago gratis de la noche.
Luego de diez minutos se adentraron a la fiesta, donde la música se escuchaba a un volumen extremadamente alto.
Laura rápidamente tomó a Zac para bailar mientras caminaban detrás de un mesero quien las llevaría a una de las mesas cerca de la barra.
Daniela, con su mirada, buscó a María José dentro del lugar; no la encontró.
