The Lake || Kookmin [ADAPTACIÓN]

Dreams

Los días no podrían ser más oscuros para Jungkook. 

Después de aquel ... Incidente.  Jimin solo había desaparecido en el aire sin explicar nada, simplemente se fue.

Cuando por fin pudo salir de su estupor, tomo sus zapatos y camino como zombie hasta su casa.  Esa noche no tenía fuerzas ni para pensar y solo se tiro en su cama y cerró los ojos. 

Jungkook soñó nuevamente. 

No fue como pesadillas que tan asustado le despertaban  No.

Esta fue diferente. 

Jungkook caminaba por un pasillo angosto y oscuro, no sabía a dónde iba o por dónde llegaba, solo caminaba con una de sus manos tentando una de las paredes húmedas y roñosas.  Apenas y podía ver sus pies y cuando la idea de que ese pasillo era eterno lo asalto entonces una pequeña luz anaranjada artificial brillo más adelante. 

Cuando llego a esa luz notó la puerta en la pared.  Algo le dijo que no tenía que abrirla pero un sollozo sonó en el interior.  Conocía ese sollozo, su corazón lo sabía pero su mente no.

"No la abras" gritaba una voz en su cabeza.  Pero los sollozos no paraban. 

No sabía a quien obedecer.  Su mente o su corazón.  Y no sabia porque se preguntaba si ya tenía la mano en el pomo de la puerta. 

Como típica pesadilla la puerta rechinó terriblemente y en el angosto pero largo pasillo el chirriante sonido hizo eco.  Los vellos del cuerpo se le erizaron por el sonido perturbador. 

Cuando la puerta se abrió todo el cuarto estaba oscuro.  La única luz era la amarillenta del pasillo y no iluminaba simplemente nada del interior. 

Dio dos pasos y los sollozos seguían sin parar.  Eran ligeros como si quien llorará intentara ocultarlo.  Un paso más y la puerta se cerró a su espalda con un golpe sordo sacándole un brinco  del susto.

Ahora si estaba completamente oscuro. No podía ver ni sus manos frente a su rostro. Se quedo quieto por unos segundos. ¿Qué debía hacer? ¿A donde ir? ¿Debería regresar? Pero los sollozos seguían y no pudo dar marcha atrás.

Se pego a la pared y con sus manos busco un interruptor. Y lo encontró.

CLICK .

La luz lleno de golpe la habitación. Jungkook cerró instintivamente los ojos y al abrirlos noto la jaula de metal que dividía la habitación en dos.

Su corazón se encogió al ver una persona en la esquina completamente hecho un ovillo. Esa persona le daba la espalda y no podía verlo claramente.

Estaba recostado en el duro piso, solo con un futón viejo y sucio bajo el. Temblaba y no sabia si era por el frío que la habitación desprendía por la humedad o si era por los sollozos.

Jungkook se había quedado paralizado ante la imagen. Pero quería sacarlo de ahí, lo necesitaba. Desesperadamente busco una puerta pero no había nada. Solo la malla de metal que parecía salir desde las paredes. No había forma. No podría sacarle.

—Jimin.—dijo desesperado y dolido. Aunque no lo viera sabía que era él. Su corazón se lo gritaba. —Jimin... Por favor... Jimin.— tomó la malla fría entre sus dedos y se dejó caer abatido. —Mirame...—susurro lastimosamente.

Entonces el bulto que era esa persona se movió. Lento y con dolor Jimin se obligo a mover su maltratado cuerpo. La luz amarilla del techo empezó a parpadear ligeramente.

Primero se levantó sobre sus rodillas y brazos, el pobre temblaba como gelatina sin poder soportar incluso su propio peso. Una vez logró sentarse sobre sus tobillos Jimin se volteo a Jungkook .