...Birthday

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—Por fin llegan.—Dijo el hombre dentro de la cocina cuando los vio adentrarse a esta.

—Lo siento papá. Fue mi culpa.—Dijo Yoongi haciendo una reverencia como disculpa. Los dos se adentraron a la cocina y el mayor de los tres parecía ocupado terminando la cena para esa noche y por lo que se olía, podía asegurar que era delicioso. Lastima que sintiera el estómago mas cerrado que culo de virgen.

—Yoongi ve a poner la mesa quieres, esto pronto estará listo.— Dijo mirando a su hijo quien inclinó la cabeza un poco ante la mirada de su padre. Yoongi  solía ser tímido y apartado pero Kook nunca lo vio como alguien débil o sumiso, no hasta que lo vio interactuar con su padre a solas.

—Si papá.—Dijo para tomar la vajilla y salir hasta la sala.

Por primera vez, Jungkook y Duckyoung estuvieron completamente solos, sin la mirada de nadie a su alrededor. Sintió sus manos sudar y trago saliva de manera dificultosa.

—¿Necesita ayuda con algo?—preguntó fingiendo calma, aunque por dentro todo temblaba.

•Claro. Puedes cortar este pan.—Le dijo mostrándole unos baguettes en una canasta.

Jungkook caminó hasta pararse justo a un lado de el hombre y tomó una tabla de madera que estaba sobre la hermosa barra de granito de colores negros y grises.

Tomó uno de los alargados panes y la corteza crujió bajo sus dedos, lo dejó sobre la tabla y cuando quiso tomar algo con que cortarlo, no pudo encontrar nada.

—Jungkook .—La voz de Duckyoung lo hizo voltearse hacía él y en un movimiento rápido la punta de un cuchillo estaba frente a su nariz, solo a un par de centímetros.— Usa este cuchillo, es especial para panes.—Jungkook sintió temblar sus manos y su nuca empezó a sudar frío. Se obligó a tomar el mango del alargado cuchillo.

Cuando lo tomó de sus manos, se giró de nuevo al pan esperando ser sercenado. Su mano que sujetaba el cuchillo de unos 15 centímetros de largo y con forma de cierra , temblaba muy perceptiblemente. Miro con el rabillo del ojo a su compañero pero este no le estaba prestando atención. Con su otra mano se apretó su muñeca hasta cortar por unos segundos la circulación, y al soltarla su mano ya no temblaba como en un principio. Respiró profundo tratando de calmar sus nervios de punta, tomó el pan y comenzó a mover el cuchillo a través del pan.

—Me alegro que hayas decidido acompañarnos Jungkook.—El pelirrojo quiso gruñir un "Ni que me hubieras dado opción" recordando el tono de orden que uso aquel día, pero se mordió la lengua y le dejo continuar.—Hace años que no celebramos el cumpleaños de Yoongi con alguien aparte de nosotros.— Comentó el mayor enfocado en su tarea de terminar la comida.— Estoy seguro que mi hijo esta muy feliz de tenerte aquí.—Jungkook sintió que el aire se escapaba despacio de sus pulmones, como si en vez de inspirar lo único que podía hacer fuera dejar el aire ir sin recuperar nada de vuelta.

Abrió sus labios para decir algo pero.—Papá, la mesa esta lista.—sonó Yoongi desde la entrada de la cocina.

—Perfecto. Esto también esta listo y parece que Jungkook también a terminado.—dijo mirando al cantante a los ojos por un par de segundos tormentosos.—Cenemos entonces.—dijo con una sonrisa y sin esperar algún tipo de respuesta.

Los tres se encontraban sentados en la mesa de cuatro asientos. La comida dispersa sobre la madera y los platos ya servidos eran lo único a la vista de Yoongi  quien no levantaba los ojos para ver a ninguno de los mayores.

Jungkook estaba sentado a la izquierda de Duckyoung, mientras que Yoongi estaba sentado frente a él. En silencio comenzaron a comer siendo el único ruido el de los cubiertos; por la cabeza de los tres miles de cosas pasaban y el ambiente seguro era más tenso que una reunión entre Hitler, Osama Bin Laden y Bush.

The Lake || Kookmin [ADAPTACIÓN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora