In the Name of Love

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Abrió una puerta. Era la única puerta que había frente a él y dentro de aquella habitación solo había un piano.

Camino hasta el centro, se sentó en la butaca y levanto la tapa del piano para acariciar las teclas blancas y negras bajo la punta de sus dedos. La melodía era lenta, melancólica y triste. No sabía dónde había escuchado esa melodía y tampoco recordaba porque sentía que debía tocarla pero esta fluyo desde su corazón hasta la punta de sus dedos. Tecla tras tecla, el sonido inundo sus sentidos y volteo a ver a quien escuchaba su concierto.

Un chico de cabello naranja y suéter a rayas le miraba taciturno.

De alguna manera se le hacía conocido pero no podía recordar porque. O porque era importante recordarlo.

—¿Por qué lo hiciste? — pregunto al tiempo que la última nota moría en el aire. No supo que contestar y solo miro las teclas bajo sus dedos. —¿Por qué? — insistió.

—¿Acaso importa? — imágenes distorsionadas llenaron su mente por un segundo en el cual se sintió abrumado por las emociones pero tan súbitas como llegaron, desaparecieron.

—¿Por qué? —

—¿Por qué importa? — volvió a negar.

—¿Por qué? —

—No importa. —

—¿Por qué? —

—No importa. Ya no importa... —

—¿Porque, JungKook? —Su nombre. Quiso volver a negarse a responder pero su nombre le detuvo. Ese era su nombre. Él tenía un nombre. Él... él era...

—¿Quién eres? — preguntó  al chico que le miro con melancolía. Había una inmensa tristeza tras sus ojos.

—Mi nombre es JiMin.—respondió con una desolada sonrisa.

JungKook llevo su mano a su pecho. Algo se había movido cuando escucho ese nombre y al ver esa sonrisa le hizo sentirse a la deriva.

—No quiero que estés solo. — dijo sin saber porque ni para que decía eso pero la expresión abatida de JiMin apenas y cambio.

—Te dije que me olvidaras. —

—No sé quién eres. — respondió mirándolo a los ojos.

—Entonces, ¿por qué no me dejas? — JungKook no tuvo que pensar la respuesta.

—No podría ni aunque volviera nacer. —

—... Eres un idiota demasiado terco. — una risilla muerta salió de sus labios grisáceos.

—Es como debe ser. En esta y todas las vidas. Antes y después. Por siempre. Estamos hechos para estar juntos... nada puede cambiar eso. No importa cuántas veces lo olvides. No importa cuántas veces te pierda, yo siempre, siempre te voy a encontrar. Así te olvide y tú te olvides de mí. Siempre te encontrare y te amare. —

—Aun no. — negó JiMin. —Aun no. —

 —

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The Lake || Kookmin [ADAPTACIÓN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora