Misfortune

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Esa mañana cuando despertó el mundo se veía gris y no solo era la sensación ambigua que acompañaba las mañanas frías y nubladas, era más como un vació que parecía querer tragarse el aire a su alrededor y que a cada segundo un intenso sentimiento de perdida se posaba sobre su corazón.
Cuando salió de la ducha en un vano intento de alejar las sensaciones aprensivas notó en su rostro una sombra de quien alguna vez creyó ser, ahora frente a él un joven hombre de veinticinco años se posaba con su pálida piel, sombras bajo sus ojos, labios opacos y mirada vacía. La vida le estaba consumiendo lentamente arrebatando cada pizca de fuerza, esa persona frente al espejo no era mas que un despojo, escombros de una fuerte edificación, todo él era más que ruinas y decadencia; la vida paso, quería creer eso, quería creer que era solo la vida y no el destino que se empeñaba en hacerle sufrir y vaya que lo hacía, más de lo que una persona normal sería capaz de aceptar pero no era cierto, los humanos nacimos para sufrir, para sobrellevar y sobrevivir a lo que fuera, entonces ¿por que no podía sobrevivir a no tenerlo a su lado? ¿Por que no podía sobrellevar la carga? Una pesadez adormeció su cuerpo, se sentía pesado y estaba hundiéndose, el agua hacia mucho que había pasado su cuello, no había mas aire que respirar y se estaba ahogando.

—¿Jungkook?— la voz de Jin al otro lado de la puerta sonó después de unos sutiles golpes a la madera.—¿Vas a tardar mucho? El desayuno ya esta listo.— dijo su primo con ese permanente tono de preocupación ligeramente disimulada.

—No, ya salgo.— respondió mirándose a los ojos una vez más para sentir la decepción de su reflejo débil y quebrado.

Cuando bajó y entró al pequeño comedor en la cocina lo primero que le recibió fue el olor a café, huevos, jugo de naranja y hotcakes. Miro a su primo y este le sonrió levemente con su mirada cristalina y limpia, rebosante de vida en comparación. Sin decir mucho tomo asiento en la silla y cuando su primo puso una taza humeante de café negro sin azúcar (justo como le gustaba) comenzaron a comer.

Jin no tardó más de dos segundos en notar el decadente estado de depresión de su primo. Jin solía sentirse muy seguro de si mismo, de su vida y el camino que recorría, claro que habían habido malos tiempos, unos peores que otros, e incluso aquellos que creyó jamas sobreviviría, pero lo hizo y esperaba que Jungkook también pudiera sobrevivir estos momentos en que parecía más que una odisea una comedia de humor negro, donde la audiencia parecía aplaudir de las desgracias en su vida.

El quería ayudar a su familia y encontraba difícil hacerlo cuando no tenía idea de como curar las heridas en el alma de su primo, o como cambiar la triste y torcida realidad sobre Yihun pero sobre todo, como hacer para que las cosas volvieran a ser como en un principio, cuando los ojos de Jungkook brillaban al escribir canciones, cuando le veía relajado en el sillón tomando café mientras escuchaba música con sus headphones. Sabía que Jungkook era una persona solitaria, que alejaba a todos a una distancia prudente donde no pudieran lastimarle, mucho ya había experimentado la perdida de alguien que amaba, pero de alguna manera se había enamorado de Jimin, en contra de toda probabilidad se enamoró de quien con toda certeza solo traería dolor a su vida.

En ese punto, mirando los lentos bocados de su primo, su mirada perdida en la nada, Jin se preguntó ¿Acaso Jungkook había tenido opción? ¿Realmente existía el destino? Y si era así, ¿Por que era tan cruel con estos chicos? Una inmensa tristeza se poso en su corazón. Jungkook , Jimin, Yoongi, Taehyung, Hoseok e incluso Namjoon y el mismo se veían arrastrados por juegos macabros de mentes enfermas, pensó también que seguramente todos ellos estaban conectados de formas que nunca pudieron imaginar.

Con tristeza y dolor Jin se juró a si mismo el ayudar a todo el que estuviera a su alcance y lo primero que haría para lograrlo era hablar con aquella persona en quien a pesar de las circunstancias confiaba con su vida, a pesar de no tener base alguna para esa confianza.

The Lake || Kookmin [ADAPTACIÓN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora