Mis padres y yo finalmente regresamos de la tumba de Shiwon. Ha sido un dia triste y dificil como cada año desde su muerte pero de alguna manera nos unió más. Tan sólo desearíamos que no fuera necesario perderlo para sentirnos así.
Esa tarde no me he sentido de ánimos de estar más tiempo con mi familia. La amo pero a veces uno necesita su espacio y ellos lo entienden, entienden que el día de hoy me hace repetir esa tarde en mis memorias.
Sentado en medio del bosque mirando el lago y él puente desde mi lugar secreto dejo que el recuerdo me inunde nuevamente.
Recuerdo llegar ese día a casa y llamar a mis padres al entrar pero no hay sonido de respuestas, Jungsu mi hermano menor esta en práctica de fútbol en la escuela así que solo me queda llamar a Shiwon, pero de igual manera no obtengo respuesta.
Esa tarde algo se sentía diferente, quiza por el frío de la casa a pesar de ser verano, o quizá el silencio penetrante. No hay ruidos en ninguna parte pero es más bien la sensación de que no puedo escucharlos. Más sin entender lo que esto significa o mejor dicho auguraba, yo me dirigí a la cocina.
Una nota de mi madre pegada en el refrigerador me avisa que la comida esta en el congelador. Mi estomago gruñe y saco el envase de plástico y lo meto al microondas pero en cuanto saco la comida, su olor me cierra el estomago.
No creo poder pasar bocado alguno y no entiendo porque siento mi estomago revuelto.
A pesar de solo dar das probadas a la deliciosa comida de mi madre, yo realmente no puedo comer. Dejo el bote y decido ir a cambiar mi uniforme por algo más cómodo.
Fue así que comencé a subir por las escaleras hasta nuestra habitación. Y a mitad de los escalones algo definitivamente no está bien. No es algo que se vea, es el sentimiento de que algo malo va a suceder un miedo irracional que se cuela por todos los poros de mi cuerpo.
Cuando llego hasta la habitación que comparto con mi hermano mi mano tiembla en la manilla ¿Por qué tiembla? La respuesta estaba en el interior.
Al abrirla, lo primero que logró vislumbrar es la sombra del cuerpo de mi hermano. La ventana aluza sus piernas en dirección a la puerta justo a la vista de la puerta semiabierta. Las veo colgando, meciendoce.
Para cuando la entrada fue abierta por completo por mi mano que ya había perdido la fuerza pero que se movio por la poca inercia aplicada lo único que puedo hacer, lo único que soy capaz de hacer.
Es llorar.
Un llanto silencioso y sin que yo siquiera me de cuenta que estoy llorando.
El cuerpo sin vida de Shiwon se mece lentamente de un lado a otro. Sus manos caen inertes al igual que sus piernas lado a lado y su rostro algo púrpura y gris me mira. Sus ojos sin vida y muy abiertos.
Él me mira, con la soga en su cuello.
Para cuando Yoongi llegó y se sentó a mi lado yo ya estaba llorando sin consuelo. El no dice nada y solo soba calidamente mi espalda. Al final le digo la verdad de mi familia y el secreto que tratamos de esconder de nosotros mismos.
—¿Por qué lo hizo?— Preguntó Yoongi mirándome con demasiada madurez para un chico tan joven.
—Su entrenador.—Dije apartando la mirada.—Un viejo tutor que lo hizo destacar en los deportes...—Intento limpiar mis lágrimas pero es inútil hasta que me ofrece un pañuelo. Limpio por fin mi llanto y miro el cielo estrellado.—Había abusado de él desde hacía años.—admito por primera vez a alguien fuera de mi familia.— Lo dijo en su nota de suicidio. Dijo... Dijo que ya no podía soportar un día más sintiendo las manos de ese hombre sobre él.—Intento no romperme a llorar nuevamente.
—La muerte... - Comenzó a hablar finalmente. —También puede ser un alivio.— Entonces entendí que Yoongi entendía más a mi hermano de lo que yo jamás podría, por lo menos hasta tiempo después.
◆◆◆
Mi cabeza sale por fin del agua y le miro a los ojos. Estoy cansado y aunque podría luchar mi cuerpo ya esta exahusto. Corrí por horas en su juego de cacería y luche con fuerza para no morir pero ahora, mientras escupo agua a borbotones con la cabeza fuera del lago, es frustrante que mis brazos ya no se puedan levantar.
—No eres el primero.— me dice mirándome fijamente, su mirada es fría y cruel. Brilla como la navaja de un cuchillo a la luz de la luna.—Pero definitivamente Chimchim... Eres el mejor.— me arrastra fuera del agua y lanza mi cuerpo sobre la arena. Se sienta sobre mi torso como muchas veces antes, y es solo un símbolo de su poder sobre mi.
Inútilmente intento resistirme pero parezco un pez fuera del agua y sin energía. Es irónica la comparación.
—La primera vez que te vi...—dijo quitando mis cabellos mojados de mi rostro.— Pensé que eras simplemente hermoso.—pasó sus manos sobre mi rostro y mis manos estaban atrapadas entre sus piernas y mi torso.— Con ese cabello tan exótico.—Sonrió y yo lo odie más aún.— Naranja... ¿sabes que amo el naranja?— se que espera que responda pero aun si pudiera no lo haría.—¡RESPONDE!—me grita golpeando mi rostro.—Lo amo.— Se respondió a sí mismo acarisiando mis cabellos.— Supe en cuanto te vi. Que serias especial.— Sonrió nuevamente y mi mente ya no procesa lo que sucede. Solo se que este hombre me ha usado, deshecho y destrozado de toda manera posible creada por el hombre... No, lo que él me ha hecho, solo puede ser obra de un monstruo.
—Te amo Jimin.— Dijo besando mis labios y aunque estoy mas inconciente que nada, aunque mis ojos ya no enfocan su rostro o nada a mi alrededor.
Aún cuando se como terminará.
Muerdo sus labios con las últimas fuerzas de mi voluntad hasta rasgar su piel y exponer su sangre a mi voluntad.
Su furia explota y después de azotar mi rostro con su puño una y otra vez me toma del cabello y me arratra hacia las aguas nuevamente.
Le escucho hablar pero ya no soy capaz de entender nada.
El sabor de su sangre y la mía se mezclan y saben exactamente igual. Una parte de mi acepta que yo también soy un monstruo quizá diferentes pero al final los dos ya no somos humanos.
En ese momento de mi vida, en ese que probablemente fue último momento, entendí a mi hermano tanto como si hubiéramos sido el mismo.
El odio hacia tu torturador se vuelve odio hacia uno mismo y hacia lo que somos, lo que nos hicieron ser. Quieres erradicarlos pero no puedes con ellos asi que solo quieres destruir lo que ellos significan.
Tu mismo.
Quitarles de las manos el juguete que tanto aman, destruirlo, aun si ese jugete eres tu mismo.
Y al igual que mi hermano tome la misma decisión. Colgué la soga bajo mi cuello y solo fue cuestión de esperar.
Trágica historia.
Pinché vato obsesivo, pagará el muy maldito por lo que le hizo a Jm.Si encuentran errores en nombres ya saben que hacer.
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The Lake || Kookmin [ADAPTACIÓN]
FanfictionJimin murió en un accidente donde se ahogo en un lago. Solo tenía 20 años de edad. Muchos dijeron que estaba en la flor de su juventud, una vida joven desperdiciada. Pero, ¿fue realmente un accidente? Se dice que se ha visto a un chico de cabello...