𝐈𝐟 𝐈 𝐊𝐢𝐥𝐥𝐞𝐝 𝐒𝐨𝐦𝐞𝐨𝐧𝐞 𝐅𝐨𝐫 𝐘𝐨𝐮

🐿️ Capítulo Setenta y Seis 🐿️

Fingiendo que me alegro de que estemos separados

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Los chicos se encontraban hablando donde siempre, sólo que esta vez, el pelinegro no les prestaba atención por andar pensando en algo más.

— Ya quiero irme. —soltó Verónica aburrida. — Pronto llegará mi carta de la Universidad de Harvard, espero que si haya quedado. —deseó.

— Al menos tienes mayores probabilidades que yo. —comentó Betty .— Tú tienes dinero, no trabajas en un bar ni tampoco tienes un expediente lleno de los problemas que tuviste este año. —se lamentó internamente, ojalá nunca hubiera golpeado aquella chica.

— Tal vez te acepten. —animó la morocha, Betty la miró con una mirada de "¿Me estás jodiendo?" porque lo más seguro es que no pudiera ingresar a esa universidad. — Sólo decía. —se encogió de hombros.

La rubia soltó un resoplido. — Supongo que tendré que buscar una universidad pública desde ahora. —decidió con decepción.

Miró a su novio.

— Hey... —le llamó pero éste la ignoró. — ¡Jug! —lo empujó levemente del hombro. El pelinegro se giró a verla.

— ¿Qué pasa, Betty? —preguntó sin estar consciente de la situación.

— ¿Tengo que mandar mi solicitud a una universidad pública? —alzó las cejas esperando su respuesta, Jughead asintió no muy convencido. — No luces seguro de tu decisión. —se cruzó de brazos burlona.

Éste retiró su brazo del cuello de la chica. — Ocupo ir a otra parte. —avisó parándose de su asiento para salir de ahí. Sus amigos lo vieron extrañados.

— ¿Qué le pasa? — +preguntó Kevin a la rubia.

Ésta negó. — No tengo idea, estábamos bien esta mañana. O al menos yo. —contestó acomodándose en el sillón.

— Deberías ir a ver qué tiene. —aconsejó Verónica algo preocupada.

— De acuerdo. —aceptó Betty parándose del asiento, se dirigió a dónde se había ido su novio. Al no encontrarlo decidió sacar su celular para llamar su número.

Fue mandada a buzón de voz.

— ¿Qué te sucede, Jug? —maldijo bloqueando su teléfono y mirando alrededor para asegurarse de que no estuviera por ahí.

— ¿Una discusión de pareja? —preguntó Joaquín apareciendo a un lado de ella

Betty negó mordiéndose el labio inferior. — Está algo raro desde que llegamos. —confesó.

— Tal vez sólo está retrasado con algo, no es de importancia. —se encogió de hombros, ella lo miró. — Tampoco es para que no le vayas a preguntar, debes ir a hablarle. —soltó.

— Es justo lo que iba a hacer, pero no lo encuentro. —le dijo volteando a todas partes.

Joaquín asintió. — ¿Quieres que te ayude a encontrar a tu chico? —se ofreció, ésta negó.

— Creo que debería dejarlo pensar unos momentos, seguro sólo quiere estar un rato solo. —supuso dándose la vuelta. — Hablaré con él cuando salgamos de la escuela, tal vez ya se le haya pasado esa actitud. —planeó.

Comenzó a caminar de regreso al lugar donde estaba antes, tampoco dejó de buscar con la mirada a aquel pelinegro.

Al dar la vuelta por el pasillo se topó con alguien allí. Volteó a verlo al rostro con una sonrisa. — Aún no entiendo porqué siempre nos encontramos cada día. —comentó.