𝐈𝐟 𝐈 𝐊𝐢𝐥𝐥𝐞𝐝 𝐒𝐨𝐦𝐞𝐨𝐧𝐞 𝐅𝐨𝐫 𝐘𝐨𝐮

🐿️ Capítulo Nueve 🐿️

Escucho las sirenas venir, veo las luces intermitentes

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El chico del gorro salió del local en busca de la rubia, no la vió al salir pero al darse la vuelta la notó junto a un auto estacionado.

Se acercó a ella. — Te dije que no era buena idea volverte a enamorar de él. —le recordó al estar a un lado.

Betty sollozó. — En serio pensé que le gustaba. —confesó mientras de sus ojos rojos salían lágrimas sin fin.

— Ven aquí. —estendió los brazos indicando para que lo abrazara, la rubia negó con miedo.

— Tienes un arma. —soltó retrocediendo.

— Mi mochila está adentro, estoy siendo amigable y es para los animales.

Algo insegura, Betty se acercó lentamente a él y lo hundió en un abrazo, ella lloró en su pecho.

— Quisiera que Toni se muriera. —confesó en su pecho, Jughead abrió la boca impresionado. — Así tal vez Billy si se fijaría en mi. —supuso para después finalizar el abrazo. — Pero como si esas cosas pasaran. —se burló.

Jughead soltó una pequeña risa incómodo, se metió las manos a los bolsillos de su pantalón.

— ¿Entramos? —Betty asintió. — Pues vamos. —dijo con una sonrisa sincera.

Así ambos regresaron a la mesa con sus... ¿Amigos? Verónica miró con lástima a la rubia y se aguardó las ganas de preguntarle cómo estaba.

El mesero llegó y se encargó de entregarles a todos lo que habían pedido, la mayoría pidió una hamburguesa.

— Siempre lo diré. —habló Kevin con la boca llena de comida. — Las hamburguesas de Pop's son las mejores.

— Obviamente. —soltó Jughead como si fuera lo más normal del mundo.

La rubia miró de reojo a Billy, algo incómoda. El castaño la volteó a mirar con una sonrisa. — ¿Pasa algo? —alzó la ceja sin borrar esa sonrisa.

Betty negó. — No, no. —soltó avergonzada.

— Alguien aquí está incómoda. —soltó burlón Reggie.

— Shh. —lo cayó la de pelo azabache. Él le hizo caso y siguió comiendo de su hamburguesa.

Betty miró a Billy. — Esa Toni... ¿Te gusta? —preguntó con dolor.

— Claro que le gusta, le fascina. —comentó un Kevin sonriente, sorbió de su bebida para no seguir hablando.

— Oh, ¿es en serio? —la rubia agachó la cabeza desanimada.

— Estos dos sólo exageran. —avisó Billy viendo mal a sus amigos. — La verdad es que ella es la mejor amiga de la capitana de las Vixens. —informó, Betty lo miró confusa. — Le quería pedir si pudiera ayudarme con algo para alguien.

A la rubia se le formó una sonrisa de ternura. — Eso es muy lindo de tu parte, me pregunto quién será la persona que reciba ese obsequio. —indicó para tomar una papa del pelinegro que tenía a lado.